El Real Madrid democratiza el gol

“Un honor alcanzar a nuestro presidente de honor. Leyenda del madridismo y rey de Copas en Europa”, escribía ayer Karim Benzema en Twitter. Con el gol en Getafe, el delantero francés ha alcanzado a Paco Gento en el séptimo puesto de la lista de máximos goleadores (con 182 tantos) del Madrid en partidos oficiales. Benzema todavía no había marcado en Liga este año. Tampoco lo había hecho Cristiano Ronaldo, cuyo gol le dio los tres puntos al Madrid en el campo del Getafe (1-2). “Era importante que se desbloqueara”, dijo Zidane. No jugaban juntos desde la final de Cardiff. Para encontrar la última vez que compartieron delantera con Gareth Bale hay que remontarse al 12 de abril en el Allianz Arena.

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En sus 100 partidos en el banquillo, Zidane ha contado con la BBC en el equipo titular en apenas 25. Las lesiones —del galés sobre todo, pero también de Benzema y en menor medida de Cristiano— y las sanciones —en este arranque de temporada el portugués se ha perdido los cuatro primeros partidos de Liga— han hecho que el tridente de ataque, innegociable para el técnico siempre y cuando los tres estuvieran bien, se haya ido quedando cojo.

Eso no ha hecho que el equipo perdiera gol y pujanzas —con Zidane se han ganado siete títulos en 20 meses, y en los últimos cuatro años el equipo ha conseguido tres Champions—, sino que dependiera menos del tridente de ataque. Ha sido así a medida que han ido apareciendo más protagonistas. El año pasado lo fueron James, Morata, Asensio e Isco. Y en este arranque de temporada lo han vuelto a ser el malagueño y el mallorquín.

Así lo resumía Zidane el sábado después de la sufrida victoria en Getafe. “Aquí hay muchos futbolistas importantes que cuando tienen la oportunidad de jugar lo hacen bien. Las individualidades son las que marcan las diferencias, pero es el equipo el que gana”. Los goles los anotaron Benzema y Cristiano. Ellos y Bale llevan 11 en lo que va de temporada (seis el portugués, tres el galés y dos el francés) por los 28 del equipo: el 39,2%. Cinco puntos más que el año pasado a estas alturas de campaña (34,4%). Un porcentaje, que, en temporadas anteriores a estas alturas, llegó a alcanzar el 83,3% (2015-16), el 74,3% (2014-15) y el 62,9% (2013-14).

Nunca, a final de temporada, los goles de la BBC han bajado del 60% de los totales del equipo (60,6 en la 2013-14; 61,6 en la 2014-15; 69,5 en la 2015-16) salvo en la pasada, que bajaron al 40,4%. De los 173 tantos que marcó el equipo, el tridente —con Bale lesionado casi toda la temporada— anotó 70. Fue la temporada más repartida en cuanto a goleadores. Salvo Coentrão, todos los jugadores de la plantilla marcaron. Y hubo siete futbolistas con 10 o más goles (Ramos y Asensio, 10; Isco y James, 11; Benzema, 19; Morata, 20 y Cristiano, 42).

En este arranque, Cristiano, que firmó el 1-2 en el Camp Nou en la ida de la Supercopa, ha brillado más en Champions (doblete contra el Apoel y doblete en el campo del Borussia). Bale abrió el marcador en Riazor y en Dortmund y dio la victoria al equipo con un golazo en Anoeta. Cuando no han aparecido ellos, lo han hecho otros. Isco anotó el doblete de la victoria contra el Espanyol. Ceballos fue decisivo en Vitoria (dos goles en la victoria por 1-2). Lucas empató contra el Levante y Asensio (con un doblete) contra el Valencia. Casemiro e Isco doblegaron al Manchester en Macedonia en la final de la Supercopa de Europa. Hasta 11 jugadores de la plantilla han marcado en lo que va de temporada. El gol, sin tanta BBC, se ha democratizado.