Maverick Viñales: “Con esta moto es imposible pelear por el título”
El piloto español lamenta que la Yamaha, con muchos problemas de tracción, no le acompañe en la lucha por el campeonato
“Carrera a carrera se me están escapando las posibilidades de título. Con cuartos y sextos puestos no se puede luchar por un Mundial”. Eran las palabras de Maverick Viñales hace dos meses todavía en el circuito austríaco de Spielberg, escenario de su peor resultado (un sexto puesto) desde la carrera de Montmeló, donde terminó décimo. Después de Austria, volvió la calma. Llegó San Marino y Viñales se subió otra vez al podio. Terminó segundo. Pero a la carrera siguiente, en Aragón, entró otra vez en crisis. Salvó una cuarta posición, pero volvió a acusar los mismos problemas de falta de tracción trasera. Equivocó la elección del neumático y sufrió de lo lindo para acelerar y salir de las curvas con garantías. Y dijo aquello de que “cada vez es más difícil luchar por el título”.
Hay que hacer memoria para recordar la última victoria de Viñales: Le Mans. Sus quejas, directas, claras, han caído en saco roto. Mientras la Ducati se descubría como una moto muy completa y potente y la Honda mejoraba a pasos agigantados, la Yamaha no solo no mejoraba, sino que parecía tener problemas inesperados. Viñales dominó la pretemporada, ganó las dos primeras carreras, y al cabo de seis grandes premios comenzó a ver el vaso medio vacío. Un problema de falta de agarre trasero para el que su equipo no siempre encuentra solución –depende del tipo de circuito y de asfalto, desestimado ya el argumento de que toda la culpa la tienen los neumáticos de Michelin– se convierte en una auténtica pesadilla con el asfalto mojado. La Yamaha no avanza a la salida de las curvas. Y la sensación de derrota antes siquiera de que se encienda el semáforo en la parrilla el domingo es insufrible en los días lluviosos. Le ha vuelto a pasar este fin de semana en Japón.
No ha sido bueno el rendimiento de la M1 en todo el curso bajo la lluvia: la moto tiene problemas de agarre, la tracción es mala y esas son las peores condiciones que puede presentarle una jornada al fichaje de la fábrica japonesa. Él, tan acostumbrado a tirar del tren trasero para salir de las curvas con rapidez en aceleración, no encuentra la manera en esos casos para ser veloz. Tiene que fiarlo todo a la frenada, pero ni es su estilo, ni es la manera más segura de competir en una pista empapada.
Viñales pasó de liderar el campeonato a ver cómo se le escapaban los puntos sin poder poner remedio. Y ahora, tercero a 28 puntos de la cabeza antes de este gran premio de Japón (7.00, Movistar MotoGP), observa impotente cómo la distancia con Márquez y Dovizioso se va haciendo mayor. “No puedo hacer más. Con esta moto es imposible pelear por el título. Cada vez que salgo a la pista y me veo el décimo, noto que el Mundial se escapa especialmente porque mis rivales están en las primeras posiciones”, explicaba este sábado en Motegi después de clasificarse en la 14ª posición.
“Está claro que las sensaciones no tienen nada que ver con las de principios de temporada, en algún momento nos perdimos”, apunta. En algunos momentos ha buscado la referencia de su compañero Valentino Rossi, pero ni siquiera en Japón le ha podido servir de guía porque tenía casi tantos problemas como él. Además, no suele dar resultado. En su box probaron a emular las soluciones del 46, pero tampoco funcionó. “Mis mecánicos han probado de todo, han montado un moto más corta, una más larga. No tengo nada que echarles en cara. Los ingenieros lo intentan, han hecho todo lo que han podido, pero los problemas siguen ahí”, cierra. Está frustrado. Su Yamaha no le acompaña en la pelea por el título.
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