‘Cinco lobitos’, un retrato de la maternidad, triunfa en el festival de cine de Málaga

La debutante Alauda Ruiz de Azúa (Barakaldo, 42 años) ha triunfado este sábado en el festival de Málaga con su ópera prima, el drama Cinco lobitos, al llevarse la Biznaga de Oro a la mejor película española y los premios al mejor guion (escrito por ella misma) y mejor actriz, compartido por Laia Costa y Susi Sánchez, hija y madre en la pantalla. La otra ganadora del certamen es la boliviana Utama, Biznaga de Oro a mejor película iberoamericana, del también debutante Alejandro Loayza, que se lleva además mejor dirección y mejor música para Cercio Prudencio, junto al trofeo del jurado de la crítica. Fueron los dos trabajos que, a medida que iba transcurriendo el festival, se situaron como favoritos. El premio a la mejor interpretación masculina ha sido para Leonardo Sbaraglia por su papel en Ámame; y Mi vacío y yo, de Adrián Silvestre, ha obtenido el Premio especial del jurado. El galardón del público se lo llevó también Cinco lobitos.

Cinco lobitos, que se estrenó en la sección Panorama de la pasada Berlinale, retrata a una madre primeriza, Amaia, que se refugia en su hogar materno en País Vasco cuando su pareja desaparece varias semanas por trabajo. El viernes ya se intuía su victoria después de que copase todos los reconocimientos paralelos del festival: el Asecan Ópera Prima, el Feroz Puerta Oscura o el del jurado joven. Utama —que consiguió el premio del jurado en Sundance en enero en la sección World Cinema— transcurre en el altiplano andino, con protagonistas que luchan contra el cambio climático, que amenaza con extinguir su modo de vida.

Son las películas vencedoras de la vigésimoquinta edición del festival malagueño, que será recordada por la vuelta de los aforos al 100% a las salas y el despliegue de la alfombra roja, que, sin embargo, quedó deslucida varias tardes por la lluvia que ha acompañado al certamen. La calima que pintó de naranja los cielos del jueves llenó el tapete de barro más tarde, como al resto de la ciudad, tras las lluvias, pero Málaga ha podido de nuevo disfrutar de las estrellas del cine después de dos años complicados por la pandemia.

El jurado de la Sección Oficial, conformado por Cecilia Suárez, Javier Cercas, Manuel Martín Cuenca, Marco Mühletaler y Marta Nieto, ha repartido el resto de biznagas entre un amplio abanico de películas. La chilena Mensajes privados, dirigida por Matías Bize, ha conseguido dos: para Rodrigo Saquel por el montaje y para Nicolás Poblete, que ha obtenido el galardón a la mejor interpretación masculina de reparto, relatando en la pantalla una dura historia que vivió en primera persona, la violación que sufrió por su tío cuando era menor.

La mejor interpretación femenina de reparto ha sido para Debora María da Silva por su papel en la brasileña A mãe (La madre), de Cristiano Burlan. Nicolás Wong ha obtenido la biznaga a la mejor fotografía por su trabajo en The Gigantes, dirigida por Beatriz Sanchis, película que ha conseguido también una mención especial del jurado. Directores como Juan Miguel del Castillo, Daniel Guzmán o Imanol Uribe, laureados en ediciones anteriores, se van este año con las manos vacías del certamen.

En cuanto al cine documental, la Biznaga al mejor filme ha sido para el guatemalteco El silencio del topo, de Anaïs Taracena, que repasa la memoria de Guatemala a través de la historia de un periodista que se infiltró en sucesivos Gobiernos del país.

En la sección ZonaZine, Lugares a los que nunca hemos ido, dirigida por Roberto Pérez Toledo, ha sido designada como mejor película española, y sus protagonistas, Pepe Ocio y Sergio Torrico, han obtenido, ex aequo, el premio a la mejor interpretación masculina. La mejor dirección ha recaído en Meritxell Colell, por Dúo, mientras que las actrices Milena Smit y Olivia Baglivi comparten la biznaga a la mejor interpretación femenina por sus papeles en Libélulas.

El director del festival de Málaga, Juan Antonio Vigar, ha destacado la eliminación de las restricciones a los aforos de las salas. Vigar, que cumplía su décima edición al frente del certamen y se ve con ganas de continuar, ha destacado que en sus bodas de plata la cita ha servido para consolidarse como “un festival que une al sector”. “Nuestra identidad es la capacidad de aglutinar a todos en esta casa común del cine español”, ha subrayado. La próxima edición, en 2023, se volverá a celebrar en marzo, del 10 al 19.