Los 14 discos de pop y rock que hay que escuchar hoy y los tres que no (diciembre de 2021)
Regresan los dos grandes del ‘indie’ español, Vetusta Morla e Izal, con sus trabajos más arriesgados y comprobamos cómo unos veteranos resurgen y otros decaen
Última selección del año antes de los resúmenes de los mejores de 2021. Asistimos al nacimiento de una nueva estrella, la londinense Joy Crookes (23 años), que nos recordará a la añorada Amy Winehouse; rescatamos al mejor Bruce Springsteen de todos los tiempos; comprobamos la valentía de Vetusta Morla e Izal con los discos más valientes de sus carreras y consideramos que lo nuevo de Ed Sheeran no va a cambiar la historia de la música. Veteranos como Abba convencen y otros como Rod Stewart, menos.
Los que sí hay que escuchar:
- Vetusta Morla, ‘Cable a tierra’
¿Quiénes son? La banda española más potente en la actualidad: por poder de convocatoria (en junio llenarán con 60.000 personas el Metropolitano) y por su ambición creativa.
¿Es tan bueno Cable a tierra? La grandeza de los madrileños se constata en este disco: podían haber seguido explotando el concepto épico marca de la casa, pero arriesgan para seguir caminando. En una época donde se reivindica la mirada hacia dentro, el sexteto se inspira en el folclor español y también en el sofisticado sonido de Radiohead: Puñalada trapera es un Ay Carmela 2021, La virgen de la humanidad evoluciona desde el folclor latino sobre una frase prestada de Charly García (“nos siguen pegando abajo”), la copla se cuela en Corazón de lava… La tierra como reivindicación desde una propuesta musical moderna. Un acierto indiscutible.
- Silk Sonic, ‘An Evening with Silk Sonic’
¿Quiénes son? Un dúo formado por Bruno Mars, el más conocido, y Anderson Paak, menos popular, pero que merece mucho la pena descubrir, un fantástico cantante (y percusionista) de 35 años, con una carrera que conviene hincarle el diente.
¿Es tan bueno An Evening with Silk Sonic? Muy disfrutable el divertimento de estos dos sensacionales vocalistas. Siendo un poco malos: el mejor grupo de versiones de funk y soul de los setenta. Toda la estética y la música remiten a Stevie Wonder, Michael Jackson o Prince. Las baladas son crema de la buena, y los temas bailables resultan imparables. Se hace hasta corto, ya que dura 31 minutos.
- Izal, ‘Hogar’
¿Quiénes son? Seguramente la banda más en alza del pop español. Llenan pabellones y en 2022 van a ser fijos en los festivales. Hogar es su quinto disco.
¿Es tan bueno Hogar? Izal se encuentran en ese punto creativo y de popularidad donde nada puede fallar. Es el momento de arriesgar, porque les va a salir bien. Su líder, Mikel Izal, escribe sus mejores textos en Hogar, exposición de miedos y reflexiones sobre un mundo que no tiene buena pinta. Musicalmente irrumpe una experimentación atrevida y coherente, que encuentra engarce con unos estribillos intratables, la especialidad de la casa. Así de bueno es Hogar.
- Abba, ‘Voyage’
¿Quiénes son? Los mismos de siempre, que lo dejaron a principios de los ochenta y se han reunido para grabar estas 10 canciones. Su último trabajo, The Visitors, se editó justo hace 40 años, en 1981.
¿Es tan bueno Voyage? No decepcionará a los seguidores del cuarteto. Ahí están las cálidas armonías vocales de ellas y el olfato de ellos para fabricar hermosas melodías. Es un trabajo muy baladista (hasta cinco), aunque se desmelena en alguna ocasión (Don’t Shut Me Down o Just A Notion). Un disco que retoma lo que dejaron, como si no hubieran pasado cuatro décadas. Un mérito, sin duda.
- Maria Rodés y La Estrella de David, ‘Contigo’
¿Quiénes son? Los dos catalanes y con interesantes carreras en solitario. Maria Rodés, primorosa en algunos de sus discos; y David Rodríguez, alias La Estrella de David, productor de gente como La Bien Querida e integrante del indie cuando era indie con bandas como Beef.
¿Es tan bueno Contigo? Fantástico disco de country y folclor con una narrativa: las diferentes fases de las relaciones de pareja, desde Hacer el amor, que lo abre, a Nos vamos a divorciar, que lo cierra. Es inevitable que el oyente se sienta identificado en varios pasajes, muchos de ellos tratados desde el humor y otros, inevitablemente, desde el trauma. En cuanto a la música es básicamente divertida, incluso bailable. Todo bien entonces.
- Reigning Sound, ‘A Little More Time with Reigning Sound’
¿Quiénes son? La banda de Greg Cartwright (Memphis, 49 años), un tipo vinculado a bandas de garage que ha ido afinando su propuesta hasta llegar a Reigning Sound.
¿Es tan bueno A Little More Time with Reigning Sound? Consiste en hacer canciones bonitas. Tan complicado como eso. Algunas veces recuerda a Roy Orbison, otras a los Flying Burritos Brothers y muchas a rock and roll sesentero. Y siempre, con gusto y pasión.
- Joy Crookes, ‘Skin’
¿Quién es? Del sur de Londres, de madre bangladesí y padre irlandés. Tiene solo 23 años y Skin es su primer largo.
¿Es tan bueno Skin? Inevitable el recuerdo de Amy Winehouse cuando se escucha la voz de Joy Crookes. A pesar de su edad, Crookes suena a cantante de soul herida y profunda. El título del disco, Skin (Piel), se refiere a cuestiones tristemente aún no superadas. “¿No entiendes que el color de la piel con la que naces está hecha para vivir?”, canta en una de las piezas. Un espléndido disco de soul moderno por una artista que solo está comenzando su carrera.
- Bernie Marsden, ‘Chess’
¿Quién es? Veterano vocalista y, sobre todo, guitarrista inglés que confirió sentimiento rhythm & blues a la primera etapa de los Whitesnake de David Coverdale. Esencial su contribución a enormes discos como Lovehunter o Ready an’ Willing.
¿Es tan bueno Chess? Cuando un músico llega a esa edad en la que todo te da igual (Marsden ha cumplido 70) realiza cosas como estas: discos tributo a sus ídolos por puro disfrute personal, sin tener en cuanta si a alguien más le va a interesar. Lo bueno es que interesa, y mucho. Marsden publicó el julio pasado Kings, homenaje a los grandes King del blues, Albert, B.B. y Freddie. Ahora, abraza al sello Chess de Chicago, cobijo durante los cincuenta del blues eléctrico. Interpreta canciones de Sonny Boy Williamson, Willie Dixon, Howlin’ Wolf, Chuck Berry… La guitarra de Marsden irrumpe elegantemente sucia, su voz resulta digna y la armónica de Alan Glen suena tan añeja que a veces parece que escuchamos a Little Walter.
- Bruce Springsteen & The E Street Band, ‘The Legendary 1979 No Nukes Concerts’
¿Quién es? Bruce Springsteen con 30 años, después de haber publicado dos discos monumentales (Born to Run, 1975; y Darkness on the Edge of Town, 1978) y a punto de editar su obra magna, The River (1980).
¿Es tan bueno The Legendary 1979 No Nukes Concerts? ¿Estamos ante el mejor Springsteen en directo de todos los tiempos? Seguramente. Solo hay que ver las imágenes de este concierto, que también están disponibles ahora: un incendiario directo de rhythm & blues con Bruce y la versión más fogosa de la E Street Band. Aquí esta todo: el imbatible equipo que hacía Bruce y el saxofonista Clarence Clemons; un repertorio de locura (The Pomised Land, Thunder Road o Jugleland y el estreno de piezas de The River como Sherry Darling o la misma The River), un músico en su plenitud como dominador del escenario y una ganas de divertirse por encima de todo, como se aprecia en la parte final del álbum, con versiones de temas que popularizaron ídolos de Bruce como Little Richard, Buddy Holly o Elvis. Carne grasa: rock and roll furioso para llenar la pista de baile.
- The Warmbabies, ‘Let’s Live Underground’
¿Quiénes son? Una banda francesa formada por experimentados músicos de la escena de allá que igual te suenan, porque han actuado en España, caso de Dum Dum Boys o Les Playboys.
¿Es tan bueno Let’s Live Underground? El álbum se abre con It’s Not Her, el mejor tema posible para empezar el día. The Warmbabies no cambiarán el mundo de la música, pero van a hacer más llevadera nuestra vida. The Beatles, Big Star o The Plimsouls. Estas son algunas referencias de los franceses, que construyen hermosas armonías con sus guitarras Rickenbacker y proporcionan estribillos para escuchar una y otra vez.
Escucha el disco pinchando aquí.
- Nathaniel Rateliff & The Night Sweats, ‘The Future’
¿Quién es? Un inmenso cantante de Misuri, de 43 años.
¿Es tan bueno The Future? Unas veces puede recordar a Bob Dylan, otras a Van Morrison y también a Nick Cave. Tómense estas referencias en positivo, porque incluso cuando nos transporta a otros Rateliff conserva una personalidad propulsada por su vozarrón y por envolver sus canciones en un soul penetrante.
- Alizzz, ‘Tiene que haber algo más’
¿Quién es? El catalán Cristian Quirante, de nombre artístico Alizzz, productor, compositor e instrumentista para C. Tangana. Este es su primer disco en solitario.
¿Es tan bueno Tiene que haber algo más? Si alguien quiere saber cómo es el pop de hoy, este disco es el mejor ejemplo. Porque es comercial, porque recoge las nuevas tendencias (básicamente la música urbana) y las adapta al pop de consumo masivo, y porque saltan estímulos continuamente en estos tiempos de atención dispersa. A algunos les parecerán letras demasiado cándidas, otros no soportarán la presencia del autotune. Pero lo que no se puede negar es que es música absolutamente moderna y atractiva. El disco se cierra con una colaboración de J, de Los Planetas, Luces de emergencia.
- Colectivo Da Silva, ‘Casa Vargas’
¿Quiénes son? Un grupo de jóvenes de Granada que (¡oh, sorpresa!) ni suenan a Morente ni a Los Planetas. Casa Vargas es su segundo disco.
¿Es tan bueno Casa Vargas? Música caliente, tropical, inspiradora, optimista y con sentido del humor. Todo suena elegante, y escriben textos hedonistas y divertidos. Adolece el pop español de propuestas tan refrescantes como la de Colectivo Da Silva. Bienvenidos sean.
- Robert Plant y Alison Krauss, ‘Raise the Roof’
¿Quiénes son? Él, excantante de Led Zeppelin; ella, una violinista experimentada con una hermosa voz.
¿Es tan bueno Raise the Roof? Ya se juntaron en 2007 para el maravilloso Raising sand. Ahora, 14 años después repiten la fórmula de las versiones, siempre saliéndose de lo obvio: eligen a Calexico, los Everly Brothers, Bert Jansch o Allen Toussaint. Lo más sorprendente es que parece un disco de composiciones propias, por la personalidad que otorgan a las canciones. No se trata de un trabajo de dúos: las dos voces se hermanan y muchas veces se superponen para parecer una. Krauss canta como los ángeles y Plant se acomoda a, para hacernos una idea, los momentos relajados de Stairway to Heaven. Hay blues, folk y country. Y todo suena crepuscular.
Los tres que no hay que escuchar:
- Ed Sheeran, ‘=’
¿Quién es? Cantante inglés de 30 años que titula sus discos con signos matemáticos: después de +, x y ÷, ahora llega =. Hay que tener mucha personalidad para atreverse a algo así, sí señor.
¿Es tan malo =? No es que sea malo, es que resulta intrascendente y tedioso. Casi mejor que fuese malo. Las baladas no superan a las de James Blunt y cuando intenta incitar al baile resulta un rumor de fondo que apenas motiva. Una pataleta sin fundamento estas palabras, porque el cantante inglés llenará estadios en cuento que se ponga de gira.
- Tom Morello, ‘The Atlas Underground Fire’
¿Quién es? Gran guitarrista y comprometido activista. Lo primero lo ha demostrado en discos de Rage Against The Machine o Audioslave, lo segundo en las marchas contra las políticas conservadoras de los presidentes estadounidenses. Él siempre ha estado allí
¿Es tan malo The Atlas Underground Fire? La fortaleza musical de Morello se despliega cuando está acompañado de bandas sólidas y de cantantes con personalidad, y tanto Zack de la Rocha (en Rage Against The Machine) como Chris Cornell (en Audioslave) la tenían. A falta de un cantante compinche el guitarrista tira de agenda. No es lo mismo. Hay cosas dignas en este disco, casi siempre cuando suena a sus exgrupos, como en Let’s Get the Party Started, con Bring Me The Horizon; o Charmed I’m Sure, con Protohype. Pero para eso ya están los discos de Rage y Audioslave, claro. Lo que difícilmente se puede justificar es la versión de Highway to Hell, de AC/DC, con la perezosa participación de Springsteen y Eddie Vedder; o esa vulgar rave de casi nueve minutos que cierra el disco.
- Rod Stewart, ‘The Tears Of Hercules’
¿Quién es? Historia gloriosa del rock and roll. Sus discos de los setenta (y alguno de los ochenta) deben formar parte de la discoteca del buen rockero. Y lo que hizo con los Faces póngase en un lugar de honor. Tiene 76 años.
¿Es tan malo The Tears Of Hercules? Existe algo reivindicable en el Stewart hortera. Seguramente es su inconfundible voz y una irrefrenable propósito de pasárselo bien que se transmite al oyente. Discos denostados por la crítica, como el ochentero Body Wishes, o aquellos trabajos de los 2000 donde reinterpretó los clásicos del cancionero estadounidense, tiene su gracia. Pero a The Tears Of Hercules cuesta defenderlo, a pesar de empatizar con el artista. La producción maquinera de muchas de las canciones conlleva indefectiblemente al desastre y las baladas se deshacen casi desde el principio. Podemos salvar dos piezas: una vacilona versión de Some Kind of Wonderful y un rockero homenaje a Marc Bolan.
Babelia
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