Cástulo desentierra la cabeza de un dios

El conjunto arqueológico de Cástulo, en Linares (Jaén), considerado uno de los yacimientos más importantes de la Península con más de 4.000 años de vida, no deja de deparar sorpresas. Este lunes, el Gobierno andaluz ha presentado el último hallazgo, una cabeza de mármol que los arqueólogos sitúan en el siglo I d.C. y que podría corresponder, según los primeros estudios, bien a una figura masculina del dios Marte o a la femenina de la diosa Minerva, ésta última documentada en reiteradas ocasiones en esta ciudad fortificada. La pieza, aunque perteneciente al siglo I, podría haber sido enterrada en el siglo IV, en un agujero realizado en la calle, donde ha sido encontrado rodeado de piedras, lo que podría significar que fue ocultada con un cierto rito ceremonial.

Cástulo fue escenario de la Segunda Guerra Púnica que enfrentó a cartagineses con romanos y una de las pocas ciudades que acuñaron su propia moneda desde finales del siglo III antes de Cristo. El busto se ha localizado por debajo del nivel del pavimento de una calle principal de Cástulo, que conectaba la Puerta Norte (o Argentaria) con el centro urbano en época romana. En concreto, las excavaciones del pasado verano recuperaron un tramo de esa calle hasta llegar a su pavimento, el que discurre ante la fachada de un pórtico monumental presidido por un posible templo, que se construyó en tiempos del emperador Augusto, y estuvo en uso un largo período de tiempo, al menos hasta el siglo IV d.C., cuando fue desmantelada la mayor parte del edificio.

Según los técnicos, esta cabeza fue intencionadamente enterrada y, aunque presenta daños en la cara que apuntan a una expresa destrucción, se encuentra en buen estado

Según los conservadores de Cástulo, la cabeza ahora encontrada, como otros fragmentos anteriores que fueron hallados en el transcurso de las excavaciones, formaría parte del programa decorativo de este edificio imperial. De hecho, en el patio central de pórtico se han conservado diez basamentos que su día sostendrían otras tantas esculturas, tanto ecuestres en un lado, como pedestres en el otro. Las últimas lluvias, así como la ausencia de una de las losas del pavimento de esa calle recuperada, arrastraron una mínima capa de tierra que ocultaba esta cabeza.

Según los técnicos, esta cabeza fue intencionadamente enterrada y, aunque presenta daños en la cara que apuntan a una expresa destrucción, se encuentra en buen estado para su posterior estudio en el Museo Arqueológico de Linares. Es una pieza de mármol blanco, donde se puede ver un gorro con decoración en cuadrados y en un lateral hay lo que parece una especie de animal con dos patas levantadas.

Cástulo fue escenario de la Segunda Guerra Púnica que enfrentó a cartagineses con romanos y una de las pocas ciudades que acuñaron su propia moneda desde finales del siglo III antes de Cristo

“Estamos ante una escultura que fue enterrada a posta para mantener su dignidad y simbolismo en el Cástulo de hace 1.600 años, un hallazgo que nos permitirá conocer mucho más la historia del conjunto arqueológico y una zona que, por su morfología, no había sido tan estudiada hasta el pasado verano”, ha destacado la consejera andaluza de Cultura, Patricia del Pozo, durante la presentación de esta escultura. El edificio en el que ha sido encontrado el busto tiene 1.200 metros cuadrados y fue construido con sillares de grandes dimensiones, del que se conocía su cabecera gracias a las intervenciones arqueológicas realizadas en los años ochenta por José María Blázquez.

Cástulo está catalogado por la Junta de Andalucía como Conjunto Arqueológico e institución del Patrimonio Histórico Andaluz con gestión diferenciada, lo que supone equipararlo con sitios tan importantes como Madinat Al-Zahra o Baelo Claudia. Durante anteriores campañas de excavación destacaron los hallazgos de un león ibero-romano en perfecto estado de conservación y, sobre todo, el llamado Mosaico de los Amores, de gran variedad cromática y compuesto por teselas características del Alto Imperio y semejantes a las de Pompeya.