La abuela áspera
Con una prosa al filo de lo notarial, Eduardo Muslip ha escrito una novela soberbia inspirada en su yaya, una mujer sobria y de pocas palabras
Lo primero que supe de la novela (familiar) del escritor argentino Eduardo Muslip, Florentina, es que su protagonista es la abuela del narrador. Debo decir que ese dato me descorazonó un poco. En todos los estudios sobre el origen de la obra de Gabriel García Márquez, por ejemplo, la figura de una de sus abuelas es casi esencial, en la medida en que de la boca de ésta salían las historias maravillosas que luego el premio Nobel desperdigó por algunas de sus narraciones, sean novelas o cuentos. No faltaron más tarde epígonos en esta materia, otros y otras novelistas que apelaron a la figura de la dichosa abuela, con tanta insistencia en algunos casos que se hacía sospechosa esa presencia casi omnipresente. En algunos casos, incluso cursi. Con este recelo comencé a leer Florentina, y no pasaron muchas páginas para entender que esta novela es otra cosa.
El narrador escribe una obra donde su peripecia se centra en la figura de una abuela gallega casi en las antípodas de las abuelas antes referidas. Florentina llega a Argentina de muy pequeña desde una aldea de Galicia. El narrador la convierte en la columna vertebral de su relato familiar. Pero lejos de encontrarnos con una abuela dicharachera y llena de historias mágicas (esas que tanto colaboraron a crear las mismas mágicas atmósferas en Cien años de soledad), siempre a punto de relatar, la de Eduardo Muslip es sobria, tirando a áspera, habla muy poco, practica esa irritante nostalgia de su tierra denostando en cuanto se le presenta la ocasión el país al que fue obligada a emigrar. La abuela del narrador no es cómoda de tener. Por no ser cómoda, sus hijas tienen la sensación de que su larga vida comienza ya a ser un poco molesta.
El narrador (decida el lector si se trata también del autor) es un observador privilegiado. Lo ve todo desde la periferia de su hogar. Observa y anota el silencio de Florentina, su feroz anticlericalismo, su distancia ante las cosas que ocurren a su alrededor. Y a la gente, la buena y la mala, que rodea a Florentina. Con una prosa al filo de lo notarial, Eduardo Muslip ha escrito una soberbia novela.
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Autor: Eduardo Muslip.
Editorial: Caballo de Troya (2018).
Formato: tapa blanda y ebook (128 páginas).
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