_
_
_
_
érase una canción
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

‘I Feel Love’ o cuando se escribió el futuro de la música pop

Giorgio Moroder creó una composición cantada por Donna Summer, repleta de mantos de sintetizadores polifónicos y ritmos secuenciados

Donna Summer y Giorgio Moroder.
Donna Summer y Giorgio Moroder.

Mientras grababan Heroes en Berlín, en 1977, Eno hizo que Bowie escuchara una canción asegurándole que iba a ser fundamental para la música de los próximos 15 años. Solo se equivocó en un detalle, la influencia de I Feel Love abarcaría mucho más tiempo. El single tenía letra de su intérprete, Donna Summer; la música la firmaban Giorgio Moroder y Peter Bellote, aunque fue el primero quien le imprimió su particular sello sonoro.

Nacido en 1940 el en sur del Tirol italiano, Moroder tocó por primera vez el sintetizador Moog en un éxito pop, Son Of Your Father, de Chicory Tip, publicado en 1972. Tres años después comenzó a grabar música disco con Summer en Múnich, creando un sonido que se identificaba con el nombre de la ciudad. Hasta 1977, los discos de Summer con Moroder y Bellote eran música de baile hecha con instrumentos tradicionales. I Feel Love anunciaba algo radicalmente distinto.

El sencillo formaba parte del álbum I Remember Yesterday, que integraba capítulos de la historia de la música –Motown, New Orleans, doo wop- al canon disco. El elepé se cerraba con la canción que, nunca mejor dicho, representaba el futuro. Creada casi exclusivamente con instrumentos electrónicos (el único sonido no sintético es el del bombo), la canción anunciaba una revolución en el pop. Mantos de sintetizadores polifónicos y ritmos secuenciados, hilvanados en una estructura repetitiva que, pese a la frialdad de los instrumentos, transmitía algo humano. Moroder lograba algo que hasta entonces solo Kraftwerk dominaban, extraer emociones de los sintetizadores. Ese factor, reforzado por la voz sensual de Summer, que aparecía y desaparecía de la canción, era lo que definitivamente la dotaba de magia. La cantante había gemido orgásmicamente en Love To Love You Baby. En I Feel Love una interpretación menos explícita abría un mundo de posibilidades, todas ellas apuntando en una misma dirección.

1977 fue el año en el que la música discotequera dejó de ser un estilo del gueto para convertirse en un rito universal. La película y la correspondiente banda sonora de Fiebre del sábado noche fueron el detonante, pero no llegaron al público hasta finales de ese año. I Feel Love se publicó el 9 de julio de 1977 y además de contribuir a hacer popular la música disco, también mostró el futuro de buena parte de la música pop, erigiendo a Moroder en uno de los tótems de la electrónica.

I Feel Love combinaba un sonido de raíz europea con una parte vocal americana, enraizada en el soul, una fusión innovadora que se adelantó cinco años al Planet Rock de Afrika Bambaataa. Moroder sería requerido para producir a Blondie y Bowie y compondría bandas sonoras como la de El expreso de medianoche. Summer también grabó más discos con él, pero nunca hicieron nada remotamente parecido a I Feel Love. No obstante, un fragmento de otra de sus canciones - el bombo del patrón rítmico en Our Love-, se convertiría en uno de los pilares del celebérrimo Blue Monday de New Order.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_