Paul Thomas Anderson frente los clásicos

La importancia de los lazos familiares y generacionales; la transmisión de conocimiento entre padres e hijos; la preocupación por la puesta en escena pero también el máximo esmero por cuidar la estructura del relato y los diálogos… Los críticos Desirée de Fez y Quim Casas analizan y diseccionan el cine de Paul Thomas Anderson en una animada charla. Una conversación que forma parte del especial Paul Thomas Anderson vs los clásicos, que TCM emite el sábado 28 y el domingo 29 de mayo. Una programación en la que se podrán ver dos largometrajes de la filmografía de este director californiano, Sidney y Pozos de ambición, junto con películas clásicas que le sirvieron directamente como fuente de inspiración. Títulos como Malas calles de Martin Scorsese, Gigante de George Stevens, El resplandor de Stanley Kubrick, Nashville de Robert Altman o Carta de una desconocida de Max Ophüls.

“En el caso de Pozos de ambición es evidente que Gigante está ahí detrás como referente conceptual, estético y temático”, afirma Quim Casas. “Es una película río que abarca, al igual que Pozos de ambición, varias etapas y años en la vida de una familia”.

La relación entre padres e hijos es otra de las señas de identidad de este gran realizador norteamericano, según ambos críticos. “Lo vemos en Magnolia”, explica Quim Casas. “Ahí, el personaje que interpreta Tom Cruise está en permanente conflicto con su padre. Mientras, en Boogie Nights, Julianne Moore no puede comunicarse con sus hijos y eso es un peso muy importante con el que carga a lo largo de todo el film. Pero si te fijas, en Sidney y en Pozos de ambición vemos, en cambio, el intento de admitir como hijos a aquéllos que no lo son biológicamente”.

Robert Altman es, para Desirée de Fez, una de las grades referencias del autor de The Master: “Boogie nights está directamente influida por Nashville y Magnolia, por Vidas cruzadas”, afirma. Quim Casas resalta que Paul Thomas Anderson “es capaz de crear estados de ánimo con la cámara pero también de escribir muy buenos guiones y diálogos, incluso en películas más bressonianas o minimalistas como Sidney en las que todo es mucho más austero”.

Además, la filmografía de este director, nacido en 1970 en Studio City, un distrito del Valle de San Fernando en Los Ángeles, se ha convertido, vista en su conjunto, en una crónica del pasado reciente de los Estados Unidos, algo que le conecta directamente con Martin Scorsese. “Pozos de ambición y Gangs of New York no solo comparten el mismo protagonista, Daniel Day-Lewis”, explica Desirée de Fez, sino que las dos cuentan “cómo se gesta algo desde la nada y con personajes que son el motor de ese cambio”.

Lo que ya nadie duda es que Paul Thomas Anderson se ha convertido en todo un clásico del cine contemporáneo. Un director que, con una filmografía de tan solo siete películas, ha sido capaz de contar cómo se ha ido formando esa idea colectiva que se llama Estados Unidos de América. Todo ello lo podrán comprobar los espectadores de TCM el último fin de semana de mayo con este nuevo encuentro entre el cine de hoy y el de ayer. Paul Thomas Anderson versus los clásicos. Cine, en definitiva, de siempre.