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LABoral de Gijón convoca un concurso para encontrar director

El centro de arte se enfrenta a una demanda por el despido del anterior responsable

LABoral Centro de Arte y Creación Industrial de Gijón acaba de anunciar que se abre la convocatoria internacional para cubrir la plaza de director, de acuerdo con el Código de Buenas Prácticas en Museos y Centros de Arte Contemporáneo. El plazo de presentación estará abierto desde hoy, 24 de marzo, hasta el 2 de junio y las bases del concurso están disponibles en la web del centro. Según las previsiones, el proceso terminará en el segundo semestre de este año.

LABoral se encuentra sin jefatura desde el pasado 16 de febrero, cuando el Patronato, presidido por la consejera de Cultura del Gobierno del Principado de Asturias, Ana González Rodríguez, destituyó de forma fulminante el anterior director Oscar Abril Ascaso, nombrado poco menos de un año antes, tras ganar un concurso internacional en el cual se presentaron unos 70 candidatos. El nuevo director será elegido por un jurado formado por tres miembros del Patronato y cuatro expertos en el ámbito de actuación de LABoral, es decir el arte vinculado a las nuevas tecnologías.

“Buscamos un profesional con amplia experiencia en el ámbito de las artes, que cuente con prestigio internacional y esté dispuesto a seguir desarrollando un proyecto singular y vanguardista, conforme al plan estratégico del centro”, indica la convocatoria. De acuerdo a ese plan, el director tendrá no sólo que liderar los proyectos de exposición, producción, educación e investigación, sino que deberá ocuparse directamente de diseñar una estrategia de recaudación de fondos “para crear una coherencia y equilibrio entre el programa y los recursos que se pongan a su disposición”.

El Patronato del LABoral se enfrenta a una demanda de Abril Ascaso por despido improcedente. “Pedimos que el despido sea nulo por vulneración de los derechos fundamentales, ya que responde a motivaciones ideológicas ajenas al ámbito profesional”, aseguró a este diario Xulia Fernández, abogada de Oscar Abril Ascaso.

El ex director tenía un contrato normal, sin ninguna clausula de blindaje y no de alta dirección como suele ser habitual en estas contrataciones. Tras el fracaso de la reunión de conciliación, la demanda se encuentra en el juzgado de lo social de Gijón y se prevé que se resolverá en un par de meses. Abril Ascaso fue acusado de “ineptitud” por la presidenta del Patronato y consejera de Cultura, Ana González Rodríguez, que justificó su destitución afirmando que “el programa presentado era inconsistente y el planteamiento incoherente”. “Abril Ascaso no supo definir objetivos tangibles. Hemos detectado falta de visión estratégica y de capacidad de análisis, además de una reiterada actitud pasiva, que ha generado una situación de confusión general”, aseguró entonces una portavoz de la Consejería.

Por todo ello Abril Ascaso, que no llegó a realizar ni una actividad del proyecto por el que le escogieron, pide la readmisión y, al ser inviable, la correspondiente indemnización, además de una compensación por daños morales equivalente a las mensualidades desde su despido hasta final de 2015, fecha en que hubiera finalizado la programación presentada por el ex director y aprobada por el Patronato el pasado diciembre. Con la destitución de Abril Ascaso toda su programación ha sido cancelada, incluida la muestra Performacciones, que debía inaugurarse en marzo.

“Resulta cada vez más meridiano que de nada nos sirven ya la estipulación de concursos públicos, por muy abiertos y transparentes que estos sean, si son instrumentalizados para proyectar una imagen -perversa y desubstancializada- de la naturaleza democrática de unas infraestructuras culturales sometidas al arbitrio y al control de las instancias partidocráticas y patronales. La secuencia de casos de censura y destituciones acontecida en los últimos meses en el ámbito artístico no debe ser leída atomizadamente, sino como expresión clara de un intento de toma del poder y desactivación estructural por parte del régimen de un ámbito de producción de discurso crítico que, en estos momentos de rearmamiento de la política real por parte de la ciudadanía, entienden y saben que no pueden permitirse”, indica en un correo electrónico a este diario Abril Ascaso, a propósito del concurso convocado por LABoral y aludiendo también a la reciente polémica del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona.

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