Albert Maysles, maestro del documental
Defensor del cine directo junto a su hermano David, retrató a The Rolling Stones, Truman Capote o Marlon Brando
Albert Maysles, cineasta, murió el jueves 5 de marzo en Nueva York, víctima de un cáncer a los 88 años. En compañía de su hermano menor, David, fallecido en 1987, los Maysles impulsaron lo que se llamó cine directo, un tipo de documentales donde intimaban con los protagonistas antes de rodar. Idealmente, el equipo se hacía invisible y los personajes se olvidaban de su presencia.
Albert manejaba una cámara ligera y David se ocupaba del sonido; evitaban llevar luces aparatosas. Huyendo de los guiones y de las voces en off, rechazaban las certidumbres de los documentalistas politizados. Aunque no evitaron los temas duros (el aborto, la pobreza), preferían que la realidad dictara el resultado final.
Su técnica de “la mosca en la pared” les funcionó incluso cuando enfocaban a figuras habituados a los medios. Así ocurrió en Orson Welles in Spain (1963), Meet Marlon Brando (1965), A visit with Truman Capote (1966) y el famoso Gimme Shelter (1970).
Este último captó la locura de la gira de reaparición de los Rolling Stones. Los Maysles ya habían acompañado a los Beatles durante su primera visita a EE UU, pero en 1969 se encontraron más drama del previsto. Estaban presentes durante el catastrófico concierto de Altamont, donde un joven armado fue apuñalado por los Ángeles del Infierno, a los que se les había encomendado la seguridad del evento. Luego, permitieron a Mick Jagger ver ese material que le dejaba en tan mal lugar. Y filmaron su reacción, claro.
De origen judío, graduados en Psicología, mostraban empatía por los retratados. Podían ser agobiados vendedores de biblias, como ocurría en Salesman (1968), o las arruinadas damas WASP de la alta sociedad neoyorquina que aparecían en Grey Gardens (1975), habitantes de una casa deteriorada, que el Departamento de Salud quería derribar. Los Maysles consiguieron su permiso para filmar antes de que sus parientes, incluyendo a Jackie Kennedy Onassis, decidieran ayudarlas económicamente. Con el tiempo, la mansión sería adquirida por Ben Bradlee, el exdirector del Washington Post.
Sin cambiar de nombre, Grey Gardens tendría una ilustre descendencia: inspiraría un musical en 2006 y, tres años después, un largometraje de la HBO, con Jessica Lange y Drew Barrymore (más dos actores encarnando a los Maysles). En ambos casos, Albert peleó con los guionistas para que fueran más allá de la caricatura de unas señoras excéntricas. Rufus Wainwright también escribió una canción al respecto.
Albert fue contratado por Martin Scorsese como uno de los cámaras que filmaron a los Stones para su película Shine a Light; también le llamó Paul McCartney para The Love You Make, su reacción a los atentados del 11-S. Personalmente, Albert se inclinaba más por la música clásica: firmó documentales sobre Jessye Norman, Vladimir Horowitz, Seiji Ozawa, Leonard Bernstein y, su preferido, Soldiers of Music, crónica del retorno de Mstislav Rostropovich a Rusia.
Incluso cuando ya tenía reconocimientos oficiales, Albert siguió batallando por su concepto del documental. Se ocupaba siempre de la cámara principal, construida según sus especificaciones. Si encontraba reticencias por parte de los distribuidores, reaccionaba alquilando cines y ocupándose de la promoción. Apoyaba a los nuevos documentalistas y celebraba las posibilidades aportadas por el vídeo. En festivales y seminarios, sus consejos eran sencillos: “Acércate al tema con amor y comprensión. Evita ideas preconcebidas y deja que la historia se revele: todas las personas quieren contar su vida”. Albert Maysles no llegó a ver estrenado su último trabajo, In Transit, donde indagaba en una comunidad fugaz: los viajeros en trenes de largo recorrido.
Babelia
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