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La musa de ‘La dolce vita’

Su carrera cinematográfica recorrió una buena parte de los géneros cinematográficos entre la cara A y la cara B de Hollywood

La actriz Anita Ekberg.
La actriz Anita Ekberg.Hulton Archive (Getty Images)

La dolce vita (Federico Fellini, 1960)

Aunque Anita Ekberg acabó bastante harta y aburrida de que en todas las entrevista le preguntasen por La dolce vita, su afortunado encuentro con Federico Fellini terminaría haciendo de ella uno de los iconos del siglo XX con la ayuda de la Fontana de Trevi y Marcello Mastroianni. Fellini fundía el viejo Mare Nostrum y el mito erótico de Lorelei.

Los Mongoles (André de Toth, 1960)

Como otras estrellas de Hollywood Anita Ekberg encontró en el peplum italiano refugio cinematográfico para una carrera que entraba en decadencia. El peplum abandonaba los paisajes de la Roma clásica para cabalgar por las estepas polacas junto a los feroces guerreros de Gengis Khan.

Boccacio 70 (Federico Fellini, 1962)

Pelicula de episodios al gusto de la época que reunió a la plana mayor del cine italiano, Vittorio de Sica, Luchino Visconti y Federico Fellini. Anita Ekberg volvía a ponerse a las órdenes de Fellini como luminoso – y también algo monstruoso- objeto de deseo y tentación de pacíficos viandantes.

Cuatro tíos de Texas (Robert Aldrich, 1963)

Western extravagante y paródico en honor y gloria de la pareja Frank Sinatra y Dean Martin emparejados a una frondosa Anita Ekberg embutida en vestuario decimonónico y el sexy salvaje de una Ursula Andress que se afianzaba como nuevo sex symbol después de su aparición en el primer James Bond. El titulo español de la película sigue sorprendiendo cincuenta años después.

Bambola (Bigas Luna, 1996)

Aunque el protagonismo de la película recaía en la hoy bastante olvidada Valeria Marini , aquí en estilo maggiorate, Bigas Luna proyectaba sus fantasmas eróticos y al mismo tiempo rendía tributo a la veterana estrella, poniendo casi broche final a la carrera de la que fuera uno de los grandes sex symbols de la posguerra y encarnación del erotismo nórdico.

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