El deporte tiene voz femenina

Hasta hace pocos años, las retransmisiones deportivas en televisión eran territorio privado de los hombres. Sin embargo, las voces femeninas hablan cada vez más alto. Y con conocimiento de causa, ya que el deporte se disfruta más en las pantallas si es comentado por exdeportistas. Hoy, las mujeres acceden a las cadenas con mayor asiduidad, recicladas en comentaristas. Han encontrado un hueco que, no obstante, aún debería convertirse en un espacio más amplio, especialmente si se compara con el que ocupan los exdeportistas masculinos.

Por otro lado, aún resulta complicado encontrar deportes masculinos comentados por mujeres: “Yo sí retransmito partidos masculinos y me encanta, aunque es verdad que hago más tenis femenino. Creo que un partido masculino lo puede analizar igual de bien una mujer, pero tienes que estar al día como en cualquier labor”, argumenta Conchita Martínez, uno de los iconos del tenis español, que actualmente colabora con Eurosport. Por su parte, Amaya Valdemoro, considerada por muchos aficionados como la mejor jugadora de baloncesto española de la historia, y ahora comentarista de la Euroliga masculina en Canal +, asegura que habría que “educar” a los espectadores “para que se asomen al deporte femenino, porque ahora hay menos hombres que ven deporte femenino que mujeres que ven deporte masculino. Y son muy entendidas” y afirma que, aunque en el deporte puede haber diferencias entre hombres y mujeres, “para contar y ponerte ante un micrófono no hay ninguna”.

“Yo analizo partidos masculinos y me encanta”, señala Conchita Martínez

Martínez y Valdemoro son dos ejemplos de exdeportistas de élite que ahora comentan partidos para los espectadores. Hay muchas más, como Almudena Cid en gimnasia rítmica, Laura Muñoz en gimnasia artística, Dori Ruano en ciclismo, Marta Senra en patinaje artístico... La exgimnasta Ángeles García colabora como comentarista en TVE: “Una cosa es saber mucho y otra saberlo comunicar. Se trata de hacer entender el deporte. Como la gimnasia es un poco desconocida para muchos espectadores, lo más difícil es encontrar las palabras que lleguen y que se entiendan. Los periodistas eso lo estudian, pero yo tengo que pensar mucho lo que digo y cómo decirlo. Me comentan: ¡pero si tú eres muy impulsiva y en la tele eres muy mesurada”, asegura. En la capacidad de comunicación insiste la exesquiadora María José Rienda, actual colaboradora de Eurosport: “Es difícil, tienes que contar bien lo que tú tienes tan claro y lograr que la gente lo entienda. Yo no me considero una especialista, sólo una exdeportista que participo en las retransmisiones”.

Lo cierto es que la condición de exdeportista puede ser un plus ante el micrófono: “Como comentarista especializada, claro que sí, le da ese valor añadido de información y contenido que sólo conoce y puede transmitir quien ha estado en esas situaciones”, afirma Conchita Martínez. “Un narrador aporta datos y experiencia comunicativa, y una exdeportista aporta su experiencia, porque puedes explicar momentos y sensaciones que solo has vivido tú, que has estado dentro. La prueba es que a veces yo me adelanto a las jugadas”, confirma Amaya Valdemoro.

“Una cosa es saber mucho, y otra saber comunicarlo”, dice Ángeles García

En cualquier caso, todas las exdeportistas se apasionan ante el micrófono, pese a combinar pasión y nervios: “Disfruto de la posibilidad de hacer que la gente conozca mi deporte desde su realidad más íntima. En gimnasia hay mucha leyenda negra y me alegro de mostrar que es como otros deportes, con sus dificultades, renuncias y sus alegrías”, afirma Ángeles García, a quien si se le pide comparar los nervios ante el micrófono con los nervios en una competición responde que se viven de diferente forma porque “en la pista hay momentos en que no eres consciente de lo que haces, eres joven, sufres más, tienes que moverte ante un jurado…. Y sobre todo, si fallas, se acaba todo, pierdes la competición y adiós. Ante el micrófono hay menos riesgos, lo haces desde la sinceridad y aceptas que haya gente a la que no le gustes”.

Por su parte, María José Rienda lo vive con responsabilidad: “Lo más bonito es seguir ligada a mi deporte, que ha sido mi vida, pero es un reto y si has sido un referente deportivo ahora tienes una mayor responsabilidad al dirigirte a la gente. Para ser comentarista hay que ser muy valiente. Tienes que ser comedida y ser tú misma a la vez, además de coordinarte con otros comentaristas… Al final es una conexión con 22 años de carrera deportiva, en un deporte que amas, y eso se disfruta. También disfruto mucho la conexión con las redes sociales”. Amaya Valdemoro se entusiasma cuando es consciente de “seguir emocionándome con el baloncesto. Me escucho en casa y me sorprendo de mi naturalidad, de cómo me emociono… Vivo el baloncesto desde el otro lado, pero lo vivo”; también insiste en la responsabilidad: “Aquí soy una rookie y tengo que aceptarlo, pero como jugadora he sufrido las críticas del comentarista, así que intento ser muy responsable”. La sensación de emoción también la comparte Conchita Martínez: “Creo que una combinación de espontaneidad y análisis es ideal; yo soy bastante técnica y me gusta analizar golpes, estrategias... En este trabajo estoy encantada, cuando me retiré en 2006 comencé mi carrera profesional con Eurosport, y hasta la fecha. Espero seguir muchos años más. Me gusta poder narrar lo que veo en cada momento, me gusta cuando los puntos son disputados, aunque también es duro comentar partidos de madrugada o tener que estar hasta ocho horas narrando para que el espectador disfrute y además aprenda”.