‘Mogambo’: la aventura africana de John Ford
El cineasta aceptó el encargo porque era una oportunidad única de viajar a África y rodar en Kenia, Uganda y Tanzania
Mogambo era una nueva versión de Tierra de pasión (Red dust), un film ambientado en Indochina que Clark Gable había protagonizado en 1932 al lado de la explosiva Jean Harlow, basado a su vez, en una obra teatral. En un primer momento el remake iba a estar protagonizado por Stewart Granger pero este, al parecer, no quería pasar mucho tiempo separado de su entonces esposa, Jean Simmons, y el papel cayó nuevamente en manos de Clark Gable.
John Ford aceptó el encargo de dirigir la película no porque le entusiasmara la historia, sino porque era una oportunidad única de viajar a África y rodar en escenarios naturales de Kenia, Uganda y Tanzania. Su única petición fue contar con su adorada Maureen O’Hara pero la Metro se mostró inflexible: el papel de la desenfadada Eloyse Kelly sería para Ava Gardner. Ford se enfureció y durante días trató de forma despótica a la actriz. Clark Gable salió en su defensa, pero Ava sabía valerse por sí misma. “Soy tan irlandesa y tan cabrona como usted y no pienso soportar esta situación”, le dijo al director. “Si no me quiere aquí, no tiene más que decírmelo”. Curiosamente, con el paso de los días, entre director y actriz nació una franca camaradería. En pleno rodaje Ava descubrió que estaba embarazada de Frank Sinatra y pidió permiso a Ford para viajar a Londres durante una semana y así poder abortar. A la prensa se le dijo que tenía disentería.
También entre Clark Gable y Grace Kelly hubo más que palabras. Durante el rodaje comenzaron un romance que duró varios meses. Gable tenía entonces más cincuenta años: Kelly, tan solo veintitrés. Cuando la filmación terminó dejaron de verse durante un tiempo, aunque reanudaron brevemente la relación cuando la futura princesa de Mónaco preparaba La angustia de vivir.
El rodaje en África fue especialmente duro, con temperaturas de más de 45 grados, pero eso apenas se nota en una película que trasmite y derrocha exotismo, aventura, humor y mucha tensión sexual. Quizá no tanta como la que consiguieron darle los censores españoles cuando se estrenó en nuestro país en octubre de 1954. No les pareció correcto que hubiera una historia de amor entre una mujer casada y el guía del safari al que da vida Clark Gable y, alterando algunos diálogos en el doblaje, trataron de hacer ver que los personajes de Linda Nordley (Grace Kelly) y Donald Nordley (Donald Sinden) no eran marido y mujer, sino hermanos. El resultado fue aún peor porque quizás esquivaron un adulterio, pero insinuaban claramente un incesto. “¿Qué hacen estos dos hermanos compartiendo la misma cama de una habitación?”, se preguntaban muchos espectadores.
Tanto Ava Gardner como Grace Kelly fueron candidatas al Oscar en 1954. La primera como actriz principal; la segunda de reparto. Pero ninguna de las dos ganó el premio. Con el paso del tiempo, el verdadero galardón es poder verlas por parajes africanos disputándose el amor de un apuesto cazador en una de esas pequeñas grandes películas que ha dado la historia del cine.
Babelia
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