La apuesta por el vestir formal no es sólo cosa de las casas tradicionales. Se nota en todas partes. Alexander McQueen, ahora en las manos creativas de Sarah Burton, ha creado una línea a medida en colaboración con Huntsman, una sastrería de Saville Row, que consta de tres piezas. Un esmoquin (en la imagen), un traje cruzado y un abrigo. Solo se fabrican a medida y se podrán encargar a partir de junio en la tienda londinense de McQueen. Por su parte, Salvatore Ferragamo ha presentado su primera colección de joyas masculinas, que lanzará al completo en mayo. Se trata de un proyecto conjunto con Gianni Bulgari que incluye anillos y gemelos.El terciopelo ha reinado en los desfiles. De izquierda a derecha, tres interpretaciones. Umit Benan, en su segunda colección para Trussardi, se vale de él como contrapunto de las abundantes referencias militares. Dolce&Gabbana lo incluyen en su oda a la sastrería barroca junto a bordados dorados inspirados en las filigranas de las iglesias. Finalmente, Christopher Bailey lo utiliza en Burberry para trajes que se protegen de la lluvia con plumíferos cortados y paraguas con mango de pato.PIER MARCO TACCA/ VITTORIO ZUNINO CELOTTO/ GIUSEPPE CACACE (GETTY/ AFP)El más inteligente de los golpes de efecto vistos en esta semana de la moda ha sido el de Miuccia Prada. Horas antes de que la plana mayor del cine y la televisión se reuniera en Los Angeles para los Globos de Oro, consiguió que nueve destacados actores desfilaran en su desfile. Willem Dafoe (a la izquierda), Adrien Brody (en el centro), Gary Oldman (a la derecha), Tim Roth, Jamie Bell, Emile Hirsch, Garrett Hedlund y los gemelos Carril pusieron el foco mediático sobre una colección que quería ser “una parodia del poder masculino” y en la que los detalles revelaban el travieso humor de la diseñadora.GIUSEPPE CACACE/GIULIO DI MAURO (AFP/ EFE)Si alguien sabe estos días lo que es el foco mediático es Raf Simons. Nadie se pronuncia sobre si finalmente será él quien ocupe el puesto vacante de director creativo en Dior. Él, mientras guarda silencio, sigue trabajando en Jil Sander. La colección masculina de otoño/invierno 2012 que ha ideado para la firma parte de un hombre misterioso que bebe de películas como 'Shame' o 'American Psycho'. Tras varias temporadas de intensos colores, Simons vuelve al negro. Eso sí, puntuado por animales y motivos infantiles.TULLIO M.PUGLIA (GETTY)Esta semana de la moda ha apostado por 'castings' de hombres con edades y físicos variopintos. Como el cinematográfico elenco de Prada, la presentación de otoño/invierno 2012 Brioni estuvo protagonizada por modelos, artistas y empresarios de varias generaciones. Un concepto que entronca con la campaña publicitaria de la firma para esta primavera, en la que el fotógrafo Boo George retrata al jefe de la policía de Oslo. Para recrear varios momentos en el día de un hipotético cliente de Brioni, se organizaron en Milán habitaciones temáticas: una reunión de trabajo (en la imagen), una visita al sastre, un aperitivo o una partida de póquer. En todas ellas, grupos de hombres lucían los suntuosos trajes y abrigos de la firma. Los colores y materiales querían evocar un viaje al Ártico.El baile de sillas que últimamente domina la moda también deja huella en el sector masculino. La casa Ermenegildo Zegna ha estrenado estos días director creativo en su línea más moderna, Z Zegna. El que fuera su responsable durante 14 años (Alessandro Sartori) ha sido fichado para crear la línea de moda de Berluti. En Z Zegna le ha reemplazado Paul Surridge, antiguo responsable de la división de hombre en Louis Vuitton que ha dejado esa plaza a Kim Jones. ¿Embrollado? Desde luego. Para el estreno de Surridge (a la izquierda con el actor Daniel Brühl), Z Zegna escenificó una puesta en escena tecnológica en la que el desfile era retransmitido “a través de los ojos de la estilista Anna dello Russo" (en la imagen de la derecha).Hubo abundantes referencias a lo militar en la visión de Trussardi de Umit Benan, en el estudio de materiales de Giorgio Armani y también en la paródica propuesta de Miuccia Prada. Pero fue Donatella Versace quien más lejos llevó la ironía con un estampado de camuflaje psicodélico y floral. Versace exhibe así su buen humor, a los pocos meses de protagonizar una colaboración con la cadena sueca H&M. Este mes, por cierto, se pone a la venta una colección crucero que supone el segundo fruto de esa alianza.GIUSEPPE CACACE (AFP)
