Mecal: muchos cortos y un gatito
El festival internacional de cortometrajes de Barcelona programa 350 trabajos de 30 países
¿Cuáles son los vídeos que arrasan en internet? Los de gatitos. Esta es la imagen para promocionar el Festival Internacional de Cortometrajes de Barcelona. Mecal: la de un lindo gatito que juega con un ovillo mientras podemos leer: "Con cada corto que te pierdes, muere un gatito", con la idea de promocionar el género del corto que también necesita mimos y protección, explica Roberto Barrueco, director de este festival que comienza mañana.
Tras visionar 3.500 cortos de 30 países, Barrueco asegura que el festival que dirige es el que recibe más solicitudes para participar de España.
Al final, solo han sido seleccionados 350 cortos, de los que competirán 120 en las diferentes secciones. Entre ellos los realizados la República Checa, el país invitado de este año. "Allí se realizan trabajos un poco duros, sin llegar a la depresión del cine polaco, muy cuidados y con gran calidad de los actores y que contrastan con el estilo fresco de los españoles", aseguró Barrueco durante la presentación. Según explicó, en España el panorama del corto es "positivo y estable, sobre todo en Madrid, Cataluña y País Vasco, donde se hacen pocos [entre 300 y 400 al año, frente a los 1.500 de Francia], de los que el 25% se distribuyen fuera".
Entre las secciones de este año destacan una sobre Star Wars con parodias, relecturas y publicidad que rinde homenaje a la saga; la dedicada a los pequeños para "que vean películas que se alejen de la estética Disney"; una batalla de programadores; un especial terror y otra sobre sexo, llamada "lluvia dorada".
"A mi el cine no me gusta", aseguró el ilustrador Juanjo Sáez (Arròs Covat), miembro del jurado de este año. "No entiendo cómo algo que se puede explicar en diez minutos se le dedica hora y media. Los cortos son sintéticos y condensan la información", dijo el dibujante con tono socarrón.
Barrueco acusó a las instituciones de no valorar Mecal: "Tenemos más reconocimiento fuera que aquí, donde no se nos trata como merecemos" y recordó que el certamen, con un presupuesto de 120.000 euros, no había recibido este año las ayudas. "Si en las ediciones anteriores hacíamos malabarismos, este año tendremos que hacer surrealismo", dijo.
Babelia
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