Inauguración en Madrid Río... otra vez
Gallardón acude de nuevo a su proyecto estrella, esta vez para abrir al público la pasarela de Arganzuela
Bautizado como el Puente Monumental de Arganzuela, la pasarela en forma de doble tirabuzón levantada por el arquitecto francés Dominique Perrault ha sido inaugurada esta mañana por el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón. El puente, que une la calle Antonio López con el paseo de Yeserías, está llamado a ser el "icono" de todo el proyecto y una de las infraestructuras "más modernas y singulares" de la ciudad, en palabras del alcalde. Más allá de su belleza, el noveno puente sobre el Manzanares solo en la zona de Arganzuela permitirá que ningún vecino de la zona tenga a más de 300 metros un sitio por donde cruzar el río.
Gallardón ha acudido de nuevo a Madrid Río, un corredor medioambiental que une grandes zonas verdes como la Casa de Campo o los parques del Oeste y Lineal del Manzanares, para abrir al público otra parte más del proyecto. A pesar de que solo hace dos días que se inauguró el parque de la margen del río que está en Arganzuela, Gallardón ha reservado el puente de Perrault para hoy. Tampoco ha esperado a la apertura oficial de Madrid Río al completo, que será dentro de tres semanas.
13,6 millones de euros
El alcalde, acompañado por Perrault, ha dicho del nuevo puente que será el "más emblemático" de los 33 pasos que tendrá el río a su paso por la capital, todos menos uno construidos o ampliados durante su mandato. La enorme pasarela, que ha costado 13,6 millones de euros y que ha sido construida durante los últimos 14 meses en el tramo que va entre el Puente de Toledo y la playa de Madrid-Río, podrá cruzarse sólo de día hasta el próximo 15 de abril, cuando se abrirá también por las noches.
Mientras recorrían el puente, Perrault ha dicho al alcalde que ha conseguido algo que siempre ha deseado París: enterrar las autopistas que transcurren paralelas al Sena. Está conformada por dos grandes conos metálicos que casi se tocan sobre la cima de una colina y que quedan desalineados para crear un espacio que se convierte en una de las entradas principales al parque. La malla metálica, material por el que el arquitecto francés tiene una especial predilección, transforma la pasarela según el momento del día, ya que, como ha explicado Perrault, lo que por la mañana es un paseo con sombra se convierte en un objeto luminiscente por la noche, a modo de gigantesca linterna. Las farolas recrean "pájaros" o "mariposas", según la explicación del autor del proyecto. La pasarela, de 278 metros de longitud, se sitúa entre el histórico puente de Toledo y el puente de Praga, tiene carácter peatonal e incorpora un carril bici. Su interior está realizado en madera, con dos carriles separados por una mediana que servirá de banco para descansar o contemplar las vistas.
Según el alcalde, esta pasarela rompe la profecía de quienes, como antes habían hecho con la M-30, calificaron el proyecto de "sueño" que no conseguirían. "Pues bien, ese sueño ya es realidad", ha sentenciado. Gallardón ha aprovechado para reiterar que el 15 de abril estará finalizado todo el proyecto Madrid-Río, con más de 900.000 metros cuadrados devueltos a los ciudadanos, 33.000 nuevos árboles y 470.000 arbustos, más de 10 kilómetros de paseos peatonales y ciclistas, fuentes ornamentales, instalaciones deportivas y 33 pasos para "coser" la frontera que constituía la M-30.
Por su parte, Izquierda Unida ha criticado el diseño "minimalista" de otros puentes sobre el Manzanares, más allá de la pasarela de Perrault hoy inaugurada, en los que prima la falta de vallado. La coalición de izquierdas ha hecho un recorrido por estos puentes a su paso por Villaverde y ha criticado este "escenario de desigualdad social aplicada al cauce del río". "Fuera de Madrid Río hay otro río, como fuera de Cibeles hay otra ciudad", ha defendido Pérez.
Babelia
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