Sandler y Aniston siguen a su (exitoso) rollo

Hace ya 13 años desde que se estrenó El cantante de bodas y la gallina de los huevos de oro de Adam Sandler todavía no ha dejado de parir pollitos. Sígueme el rollo, que Sandler protagoniza junto a Jennifer Aniston y que se estrena este viernes 25 de febrero en España, es la última creación de su formula mágica (chistes + mujeres guapas), una receta que convirtió al también productor y músico en el séptimo actor que más dinero ingresó en 2010 según la revista Vanity Fair. Los dos protagonistas (y la modelo Brooklyn Decker que debuta en un largometraje) estuvieron en Madrid esta semana para promocionar la película. En EE UU Just go with it (titulo original) lideró la taquilla en su primera semana tras su estreno el día 11. Hasta la fecha, el filme ha ingresado 78 millones de dólares (56 millones de euros) de manera que ya casi ha cubierto los 80 que se gastaron en su realización.

"Con 42 años me encuentro mejor que con 20", asegura Jennifer Aniston

Sandler responde con un chiste a cualquier pregunta. Parece reírse de todo y de todos

'Sígueme el rollo' tiene los elementos típicos de la comedia hollywoodiense: chistes, amor y chicas guapas

La trama de Sígueme el rollo no se aleja de la típica comedia romántica de Hollywood. El guión no es lo que se define imprevisible, por decirlo suavemente. Un cirujano plástico (Sandler) se enamora de una chica despampanante (Decker) y pide a su asistente algo descuidada (Aniston) que le ayude a conquistarla. Ella acaba fingiendo ser su esposa de la que Sandler está a punto de divorciarse y él acaba dándose cuenta de que quizás no sea la modelo a la que, en verdad, quiere. Todo ello aliñado con el escenario de Hawai y con una suerte de cuenta atrás por la que cada equis minutos hay que soltar un chiste de tono sexual.

Es un género que en España nunca ha cuajado, pese a que triunfa en EE UU. A este ámbito pertenecen casi todas las películas de Sandler y muchas de Aniston, que también estuvo en la citada lista de Vanity Fair, aunque en el puesto número 18. El actor sacó pecho ante la prensa en Madrid: "Es cierto que me rodeo de mujeres guapas. No me dan miedo las etiquetas, ya que luego puedo mirar a la gente y decir: '¿a que te ha gustado mi película?". Aniston hizo hincapié en otro aspecto: "A la hora de escoger un papel no te centras en si es una comedia o no. Te interesa el personaje". De todas formas, "amo la comedia y las historias de amor", añadió la actriz en esa misma rueda de prensa que acabaría por convertirse en el show de Sandler. El actor tomó el pelo a los periodistas y, broma tras broma, protagonizó la media hora de preguntas. Aniston, nunca mejor dicho, le siguió el rollo y Decker parecía una intrusa. En cierta manera lo era. "Jennifer y yo nos conocemos desde hace años, pero nunca habíamos pasado 90 días seguidos trabajando juntos en Hawai. De vez en cuando Brooklyn nos interrumpía, nos decía que nos concentráramos", terció Sandler.

El actor parecía reírse de todo y de todos. Daba igual la pregunta, la respuesta era algo gracioso o que al menos a él le hacía gracia. ¿El mensaje de la película? "La honestidad". Punto. ¿Su personaje? "Fantástico". ¿En qué momento de su carrera se encuentra? "Ya lo he hecho todo, lo he visto todo. Igual lo dejo. Estoy harto, también de vosotros". Entre tantas bromas, era difícil saber cuándo hablaba en serio, si es que alguna vez lo hace... Más seria se puso Aniston (también junto a Sandler, pero esta vez en una entrevista concedida a EL PAÍS) ante la pregunta de por qué cree que es la única protagonista de la serie televisiva Friends que ha tenido una carrera exitosa. "¡No es verdad! Todos son famosos, trabajan. Tienen una buena carrera y una familia. Por cierto, igual un día de estos nos reunimos".

Los dos actores pasan de los 40 años (o de los 30, que según Aniston "suena mejor") y con su edad muchos de sus colegas se han operado o han recurrido al botox. En la nómina, su amiga Nicole Kidman, que también aparece en la película. Ellos sin embargo no se sienten atraídos por el mito muy hollywoodiense de la juventud eterna: "Es la vida, es normal". Es más, Aniston asegura que con sus 42 años se siente "mejor que cuando tenía 20". Tampoco tienen nada en contra de luchar en el quirófano contra el envejecimiento, "mientras haga feliz a quien se opere". Pero Sandler subraya también el efecto ridículo que tiene "cuando alguien se pasa".

Debutante con entusiasmo

El quirófano es un tema que no interesa en absoluto a Brooklyn Decker, 23 años y un cuerpo que ha levantado sospechas en la Red de alguna visita al quirófano. Sonriente y descalza, en la entrevista individual se moría de ganas por contar su debut en el cine, como si anticipara el segundo plano que ocuparía en la subsiguiente rueda de prensa: "Estaba supernerviosa, por suerte tenía a Adam y Jennifer que me ayudaban y me daban consejos".

Pareja del tenista Andy Roddick, Decker fue portada de la revista Sports Illustrated, con la que colaboró durante cinco años. Aunque el cine, reconocía, le hace más ilusión, como ilusión le hace haber estado en la Berlinale ("me encantó") y volver a España ("he estado en Sevilla, Barcelona y Madrid. Es un país estupendo, con una gran historia y una comida maravillosa. Y su café... "podría beberlo para siempre"). Hasta el hecho de que el periodista la siga en la red social Twitter pareció entusiasmarle. Por cierto, los que entren en su perfil en busca de su foto quedarán decepcionados: lleva la imagen de un perro. "Es Billy Jeane. Estoy obsesionada con mi bulldog. Siempre digo en broma que es humano y con mi iPhone le puse su cara a un cuerpo de hombre. ¡Es genial!".

Decker acaba de rodar su segunda película y a partir de la semana próxima estará "desempleada", así que lo que espera de su futuro es "conseguir otros trabajos y llegar a tener al menos una mínima parte del éxito de ellos dos", en referencia a Sandler y Aniston. Del futuro de Sandler ya saben: está harto de todo, hasta que saque su último huevo de oro. Aniston sí tiene una esperanza: "Me encanta este momento de mi carrera. Estoy donde me gustaría estar. Espero seguir así hasta que sea muy muy muy vieja".

Jugar a otra vida

Ninguno de los tres ha recibido candidaturas para los Oscar de este domingo. Ni sabrían nombrar a un favorito: "Son todas buenas películas". Pero hay al menos un papel que a Aniston le hubiera gustado interpretar: "El de Colin Firth en El discurso del rey". Si la actriz tuviera que escoger quién le gustaría ser, repitiendo un juego que también hacen en el filme, diría que Lady Gaga, "al menos por unos minutos, por esa pinta tan extravagante y para llevar vestidos color carne". ¿Quién querría ser Sandler? "Bueno, no me puedo escoger a mí mismo... así que me gustaría ser mi mujer, para poder encontrarme cuando llegue a casa".

El actor tiene otro ídolo insospechado al que le daría un Oscar: "¡Santiago Segura!". "Es mágico", dice Sandler, que coincide con el actor español en la película de próxima aparición Jack and Jill. Segura, Sandler y a Aniston cenaron en un restaurante madrileño el martes por la noche. A saber si finalmente Sandler se salió con la suya. "Te voy a sentar al lado de Santiago", le decía a Aniston. "Dios mío, ¿por qué?", respondía la actriz. Sandler estallaba en carcajadas: "Ya lo verás, cuando come es muy ruidoso".

Jennifer Aniston y Adam Sandler, "divorciados" en 'Sígueme el rollo'