Prehistoria con cinco sentidos

Cerca de mil personas han visitado ya Kobenkoba, el primer centro de interpretación del arte rupestre paleolítico de Europa instalado en una gruta, ubicada en el límite entre las localidades encartadas del Valle de Carranza y Lanestosa. Este equipamiento, que apenas lleva un mes abierto, ha precisado más de cinco años de trabajo por parte de las autoridades municipales y de Enkartur, la sociedad dedicada a impulsar el turismo en la comarca. El resultado ha sido la materialización de un entretenido recorrido subterráneo en la llamada Cueva de los Judíos, que cuenta con tres partes diferenciadas: la bóveda, la galería norte y la galería sur.

El vestíbulo alberga una exposición permanente en la que se explica cómo surgió el arte paleolítico, qué animales compartían las cuevas con el ser humano, o cómo preparaban el material para pintar. Ya en la sala norte, ubicada al final de una angosta galería, se ha instalado un montaje audiovisual multimedia bajo el epígrafe Cazadores y artistas en un mundo glacial. Esta muestra explica cómo era la vida del homo sapiens, cómo pescaban, cazaban y mariscaban. A su vez, los visitantes, pueden sentir ráfagas de aire gélido, que reproduce la temperatura glacial de la época, y los olores de las hogueras y de la vegetación de entonces.

En su primer mes de vida ya lo han visitado más de un millar de personas

El equipamiento se une a otros reclamos como las pinturas de Biañez

El objetivo de Kobenkoba, un proyecto que ha supuesto una inversión de dos millones de euros y cuenta con el respaldo de la Diputación y el Gobierno vasco, es "dar a conocer" las Encartaciones y generar una "actividad económica importante" en la zona, señala el presidente de Enkartur, Manuel Tejada. Por su parte, la concejal de Cultura de Carranza, Garbiñe Aja, añade otro reto: "Que los estudiantes de los colegios vengan aquí a estudiar la prehistoria". Ya han pasado alumnos de seis centros de toda Vizcaya desde que el centro fuera inaugurado el pasado 3 de diciembre.

Estas instalaciones se unen a otros reclamos ya consolidados de la comarca, como son las cuevas de Pozalagua, las pinturas renacentistas de Biañez y el parque Karpin Abentura.

La galería sur alberga la Pinacoteca Rupestre, un viaje a través del tiempo, donde se han reunido réplicas de algunos de los conjuntos pictóricos cuaternarios más importantes de Europa, como los bisontes de Altamira, las principales pinturas paleolíticas halladas en las cuevas de Arenaza (22.000 años), Gargas (en los Pirineos franceses, 33.000 años) o Lascaux (18.000 años), entre otras muchas, con el testimonio de un chamán incluido. Cabe señalar que esta cueva es la primera del sur de Europa adaptada para discapacitados.

Aja confía en que, cuando cumpla su primer año de vida, Kobenkoba haya registrado entre 12.000 y 13.000 visitas, objetivo más que asequible a tenor del éxito cosechado en los primeros días.