'Na floresta' de Nacho Duato triunfa en Moscú
El director y coreógrafo español inicia una colaboración estable con los escenarios rusos
El ballet Na Floresta de Nacho Duato ha abierto hoy el último estreno del teatro Stanislavsky y Nemiróvich-Dánchenko en esta temporada. Se trata de la primera obra que el director de la Compañía Nacional de Danza pone en Rusia, pero será el comienzo de lo que se perfila como una fructífera colaboración con este país. El éxito de Na Floresta, tríptico con música del brasileño Heitor Villa-Lobos, ha sido espectacular en esta tarde en que los moscovitas pudieron también ver en el Stásik -como los rusos llaman cariñosamente al citado teatro- otra obra desconocida para ellos y también de un excelente coreógrafo: Marguerite et Armand de Frederick Ashton y música de Liszt, que cerró esta velada en la que hubo una tercera obra maestra, Baile Fantasmagórico, de Dmitri Briántsev y música de Chopin, el único ballet de los tres que los rusos ya conocían.
Con este programa es natural que la sala estuviera repleta, y más con las expectativas que creó la prensa rusa en torno a los dos estrenos y particularmente en torno a Duato, al que el prestigioso diario Kommerstant calificaba en su suplemento Weekend de "español genial, que todo el mundo conoce salvo nosotros" y de "coréografo con soplo divino", cuyas obras están llenas "de una fantástica energía vital".
"Es el primer ballet que hago en Rusia. Hacía ya mucho que me apetecía venir y trabajar con una compañía rusa, porque siempre he admirado su escuela, sus bailarines, su profesionalidad, sus teatros y sus espectáculos", dijo Duato en una conferencia de prensa previa al estreno celebrada en el Stásik. La elección de Na Floresta para montarlo en Moscú fue hecha conjuntamente con el director artístico del teatro, Serguéi Filin, y se debió a que se trata de un ballet de su época temprana, explicó el coreógrafo y bailarín español, una obra que está mucho más cerca de la técnica clásica -a la que los rusos están acostumbrados- que las posteriores.
La Compañía Nacional de Danza que dirige Duato ha estado sólo una vez en Rusia, a principios de los años noventa, aunque hubo posteriormente conversaciones tanto con el Bolshói como con el Maríinski (Kírov) de San Patersburgo que luego no resultaron en nada concreto. Ahora, sin embargo, la situación va a cambiar. Duato está haciendo, por encargo del Festival Chéjov, un ballet sobre el gran dramaturgo y cuentista ruso, que se estrenará primero en Madrid y que luego, el próximo año, traerá a Moscú. Además, en el marco del Festival 2010, mostrará también otra obra en el Teatro Bolshói, Multiplicidad. Formas de Silencio y Vacío', sobre Bach, ballet estrenado hace 10 años.
La obra que está preparando sobre Chéjov no tocará el tema de las relaciones con la esposa del escritor, la actriz Olga Knipper. Lo que le interesa a Duato no es la línea, sino, explicó, el espíritu de Chéjov, su actitud ante el mundo y el hombre. La puesta en escena de la famosa obra de Ashton ha estado a cargo de Grant Coyle, del Ballet Real (Londres), mientras que la de Briántsev la ha repuesto Filin. Briántsev, que dirigía el ballet del Stásik, fue asesinado en Praga hace cuatro años.
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