José Tomás indulta un toro en Barcelona
El torero se despide de la temporada en una tarde histórica en la Monumental
Barcelona volvió a demostrar que es la plaza talismán del torero José Tomás. El diestro, que se despedía de la temporada en la Monumental, ha terminado la faena pidiendo el indulto del castaño Idílico , toro de la ganadería Núñez de Cuvillo.
El toro que volvió a los corrales con lances de remate del torero puso la Monumental de Barcelona del revés, emocionada en extremo tras una faena basada en la mano derecha, de muletazos largos y muchos redondos a un toro que repetía sin descanso en la muleta y que en ningún momento desarrolló sentido o malicia alguna.
Pasada la mitad de la faena, el público comenzó a pedir el indulto. El presidente del festejo, en un primer momento se negó, y tras la insistencia de respetable y torero, accedió.
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La polémica tras este indulto está asegurada. La justeza de fuerzas fue constante a lo largo de la lidia, tanto es así que se cuidó su castigo en la suerte de varas para que llegase en mejores condiciones en la muleta. En el tercio de banderillas se desplazó con agilidad, y se arrancaba muy pronto a los engaños en el tercio de muleta. En ningún momento hizo un sólo gesto de querer hacer por coger al torero y estuvo siempre fijo en la franela.
Con este triunfo, convertido en el más especial de los cosechados por José Tomás en la plaza que escogió para la reaparición en 2007 y para cerrar tanto la pasada temporada como esta, el diestro de Galapagar se consagra como ícono de masas.
El torero, que compartía cartel con Luis Francisco Esplá y Serafín Marín, ha entrado en la plaza bajo los acordes de un pasodoble compuesto para él por Vicente Amigo, curiosamente al compositor le brindó la muerte del toro que finalmente fue indultado. Ha cortado una oreja en el segundo de la tarde y en el quinto ha logrado enloquecer al público que llenaba la plaza y ha pedido, por primera vez en su carrera, el indulto a un toro, que ha contado con el visto bueno de los aficionados y ha concedido el presidente.
En ese quinto, José Tomás ha cortado dos orejas y un rabo simbólico y ha puesto en pie a toda la plaza en la última faena de la temporada.
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