Ariel Rot celebra sus 30 años de carrera en un concierto rodeado de amigos

El cantante argentino Ariel Rot se reencontró anoche con el público madrileño para conmemorar sus 30 años de carrera con un concierto vibrante en el que repasó algunos de sus temas más míticos, muchos de ellos incluidos en su último álbum "Dúos, tríos y otras perversiones".

A excepción de las perversiones, que varían en función de quien las juzgue, en el recital que ofreció Ariel Rot en el Patio del Conde Duque no faltó de nada: hubo dúos -con Carlos Tarque-, tríos -con Pereza-, solos de guitarra, más de un comentario audaz y, sobre todo, mucho rock and roll de manos de uno de los maestros del género en castellano, aunque antaño el mérito siempre se lo llevaran otros.

Minutos antes de las 10 de la noche apareció Ariel Rot sobre el escenario escoltado por su banda de cuatro músicos, con un atuendo de colores discutibles que, sin embargo, no desmerecía a sus más que bien llevados 47 años, visiblemente contento por "tocar en el barrio" y por las 2220 personas que llenaban el recinto, "un número mágico".

Con el tema Lo siento, Frank comenzaba Rot el repaso de su carrera trifásica, que inició a finales de los 70 siendo el cerebro -y el guapo- de Tequila, para continuar en los 90 con Los Rodríguez y rematar, a partir de 1997, con una etapa en solitario que por fin ha consolidado.

Rot no se hizo de rogar para silenciar su voz y ceder el turno de palabra a su guitarra, un tanto descolchada ésta, con la que interpretó varios solos magistrales en temas como Dos de corazones, El mundo de ayer y la instrumental Confesiones de un comedor de pizza, una de las más aplaudidas de la noche.

A continuación llegó el turno de Hoja de ruta, su canción talismán, a la que seguiría canciones más románticas como Sin saber que decir, Adiós Carnaval y Cenizas en el aire, esa pequeña joya musical perteneciente al álbum homónimo que Rot publicó en el 2000 y que el artista interpretó con más sentimiento que ninguna otra.

Entre un trago de cerveza y otro -"manzanilla recomendada por el naturalista", bromeó-, Ariel protagonizó un bloque acústico en el que, solo frente al público, y después de confesar que se había quedado en blanco y no sabía lo que tenía que tocar, decidió interpretar un tema de Moris y Me vuelvo loco de Tequila.

El artista recordó otros temas de Tequila, como Nena o la versión blues de Rock and Roll en la plaza del pueblo, y de su etapa en Los Rodríguez, como Mucho mejor, que primero interpretó en versión tango -tal y como la grabó para "Duos, tríos y otras perversiones"- con Tito Dávila al teclado y Osvi Grecco a la guitarra.

A continuación llegó el momento prometido y Ariel Rot dio paso a Carlos Tarque, cantante del grupo M Clan, junto al que interpretó la romántica Me estas atrapando otra vez -primer single del álbum- y que Ariel, fiel a su estilo espontáneo y perfeccionista, una vez empezada la canción decidió detenerla y tocarla de nuevo porque "el bajo no estaba sonando bien", para luego continuar con otro tema de Los Rodríguez, Dulce condena.

A continuación apareció el dúo madrileño Pereza para interpretar Canal 69 y Baile de ilusiones, tras lo cual Ariel Rot dio el concierto por concluido, una broma que no se creyó nadie porque, como luego afirmaría el cantante, la noche estaba siendo "demasiado preciosa como para terminar tan pronto".

Finalmente, Rot decidió invitar de nuevo a Tarque y Pereza para despedirse del público con dos de los himnos de Los Rodríguez, La milonga del marinero y el capitán y Mucho mejor.