El Vaticano celebra los 500 años de la basílica de San Pedro con una exposición

El Vaticano ha celebrado hoy los 500 años de la basílica de San Pedro con la inauguración de una muestra que recorre la historia del templo desde la colocación de su primera piedra y conmemora la figura de "la piedra sobre la que se edifico la Iglesia", el apóstol Pedro. La exposición, titulada Petros Ení, en español Pedro está aquí, está compuesta por cien obras maestras, procedentes de los más importantes museos del mundo, y que describen a través de un recorrido histórico la construcción de la Basílica, símbolo de la Iglesia.

Desde hoy hasta el 8 de marzo del 2007 se podrá visitar la exposición en el llamado Brazo de Carlo Magno, uno de los que se compone la columnata de Bernini que abraza al templo. La primera pieza de la exposición Petros Eni es el espectacular modelo de madera -escala 1:15 -, del interior de la cúpula de San Pedro, que Miguel Ángel hizo construir para ilustrar como sería. La exposición se articula en seis secciones: la primera está dedicada a los Pontífices que fueron protagonistas de la construcción de la Basílica.

Se parte así del famoso retrato de Tiziano del papa Julio II, quien puso la primera piedra del nuevo templo sobre la antigua basílica constantiniana (mandada construir por el emperador romano Constantino). El cuadro ha sido prestado por la galería del Palacio Pitti de Florencia. En esta sección se recorre la historia de San Pedro a través de los retratos de otros papas como el de Pablo III Farnese, también de la mano de Tiziano, o el cuadro de León X, una de las obras maestras de Rafael, que sale por primera vez del Museo florentino de los Uffizi, el más importante de Italia.

Dibujos, bocetos y planos

Después se pasa a los dibujos, bocetos y planos de todos los artistas Bernini, Maderno o Giacomo de la Porta, que colaboraron en la que es la basílica más grande del mundo. Además de los diseños de Miguel Ángel, el Vaticano ha querido mostrar también sus cartas, decenas de epístolas enviadas por el artista, entre las que se encuentran las mandadas a la administración vaticana donde, con su conocido carácter, exige que se le pagasen a él y a sus colaboradores. En uno de estos documentos, se lee una curiosa poesía escrita por Miguel Ángel y junto a ella un dibujo, un garabato casi infantil, que le representa mientras pinta el techo de la capilla Sixtina.

El recorrido continúa su marcha atrás en el tiempo hasta llegar a la figura de San Pedro, a quien Jesús indicó para "edificar su Iglesia". Aquí es posible contemplar obras prestadas para la exposición como el San Pedro penitente de El Greco, procedente del Museo de San Diego (Estados Unidos) o La Crucifixión de San Pedro de Caravaggio, y que sale difícilmente de su ubicación en la Basílica de Santa María del Popolo, en Roma.

La muestra recorre también las piezas encontradas en las necrópolis que se encuentran bajo la Basílica, hasta llegar a la pieza que da título a la exposición y en la que se funda toda la historia de la construcción del templo: el fragmento de pared con la inscripción en griego Petros Eni. "Que como un 'grafiti' moderno alguien escribió para indicar el lugar de la sepultura de San Pedro", ha explicado durante la inauguración el comisario de la exposición, el historiador Antonio Paolucci.