Un remedio casero anula el sistema anticopia de Sony Music
Un trozo de cinta adhesiva y cierta maña es lo único que se necesita para burlar el revolucionario sistema anticopia de sus discos de música
Como en las mejores historias de Mortadelo y Filemón, los usuarios de ordenadores personales han conseguido derribar el sistema anticopia de una de las mayores multinacionales del mundo a base de tinta, ingenio y celofán. Key2audio es el nombre de la tecnología desarrollada por la división digital de Sony y presentada en la última edición del Midem de Cannes como un revolucionario sistema capaz de impedir la duplicación ilegal de discos compactos.
El primer artista que se benefició de este invento fue Michael Jackson, cuyo disco promocional editado en 2001 You rock my world se distribuyó a las radios protegido con Key2audio. Más de 21 millones de copias después, sus creadores siguen pensando que este sistema es perfecto para proteger la propiedad intelectual en la música.
Pero un artículo publicado en la revista alemana Chip Online afirma que Key2audio no es, ni mucho menos, perfecto. Y para ello no se sirve de complejos algoritmos matemáticos ni sofisticados aparatos duplicadores; según los redactores de la revista, un rotulador o un trozo de celofán bastan para burlar el sistema anticopia de Sony, extremo que ha podido comprobar este periódico.
Este CD no puede reproducirse en PC o Mac
El sistema parte de la premisa de que cualquier cedé que pueda ser reproducido en un ordenador personal es susceptible de ser copiado, ya sea duplicando su contenido en otro disco [virgen] o traspasando las canciones al disco duro. Key2audio impide estas prácticas por el método de introducir pistas falsas que despistan a los lectores de CD-ROM y les hace creer que lo que tienen en su interior no es un disco de música, sino uno de datos. El ordenador lee una y otra vez el disco hasta que llega a la conclusión errónea de que no contiene información: "El disco no está formateado. ¿Quiere formatearlo ahora?", es el mensaje que devuelve la máquina.
Los reproductores convencionales de cedés de música, menos complejos que los que se instalan en los ordenadores, no tienen este problema, puesto que no son capaces de leer información que no sea musical.
Así que el sistema no deja, teóricamente, muchas opciones: cualquiera que quiera copiar el disco no podrá hacerlo o, al menos, no podrá hacerlo en un ordenador.
Pero a alguien se le ocurrió atajar el problema desde su misma raíz: las pistas falsas que confunden a las computadoras. La tinta de un rotulador o un trozo de cinta de adhesiva situados estratégicamente sobre la superficie del disco pueden ocultar las pistas falsas y anular la protección anticopia. Problema resuelto para el eventual copiadiscos, pero no para Sony.
El problema inexistente
A las preguntas sobre la información publicada por Chip Online, Sandra Wieflingseder, jefe de producto de Key2audio, se limita a repetir que "pintar o adherir cualquier cosa a la superficie del disco puede dañarlo irreparablemente". "¿Pero han comprobado si lo publicado en Internet es cierto?". Otra vez: "La empresa advierte a los consumidores que pintar o adherir cualquier cosa a la superficie del disco puede dañarlo irreparablemente". Wieflingseder declina comentar las cifras de inversión destinadas a su sistema anticopia y no se atreve a asegurar que algunas de las "constantes actualizaciones y mejoras" que se aplican sobre Key2audio resuelvan este problema. De hecho, se trata de un problema que, según la empresa, no existe.
Babelia
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