Los taxistas desconvocan las protestas del Mobile

El sector del taxi ha acordado este martes dar “una tregua” al Mobile World Congress (MWC) después de conseguir que la Generalitat y el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) se comprometieran a cumplir con sus reivindicaciones. Los taxistas habían amenazado con marchas lentas durante el salón de móviles si no se endurecía el control a la circulación de los coches que operan con licencia VTC para empresas como Cabify. Generalitat y AMB han celebrado el “trabajo conjunto” para desactivar el conflicto a las puertas del mayor congreso de la ciudad.

Con el congreso mundial de móviles a la vuelta de la esquina —está previsto que John Hoffman, el consejero delegado de la patronal de móviles GSMA, organizadora del evento, presente este miércoles las novedades de esta edición—, las administraciones se han apresurado para cerrar el acuerdo con los taxistas que desactiva las protestas anunciadas, y que podrían haber puesto patas arriba la movilidad de Barcelona durante un congreso al que asisten 109.000 personas.

“No hay ninguna necesidad de movilizaciones. Hay que dar una tregua, un margen de confianza, pero se está trabajando bien”, ha explicado el líder del sindicato Élite Taxi, Alberto Tito Alvarez, tras la reunión. Las entidades y sindicatos del sector se han reunido por la tarde y han acordado retirar las convocatorias de marchas lentas durante el congreso de móviles, que tendrá lugar entre el 24 y el 27 de febrero.

La decisión de los taxistas llega después de que Generalitat y AMB se comprometieran a cumplir con las reivindicaciones del sector. Los taxistas reclamaban que se desplegaran algunas herramientas de control previstas en el decreto catalán que regula la actividad de las empresas de movilidad como Cabify o Uber.

La principal reivindicación era crear un registro electrónico único —que fusionará datos del Ministerio de Fomento con los del Govern y la AMB— para dejar constancia de la actividad de los coches que operan con licencia VTC. Este registro incluirá los horarios, los plazos de contratación (el decreto establece que el servicio de un VTC tiene que solicitarse con al menos 15 minutos de antelación) y los días de descanso. Mediante este registro, la Generalitat y el AMB podrán avisar a las empresas que no cumplen con la regulación. Esta herramienta permitirá también controlar las VTC que operan en Cataluña pero pertenecen a otra comunidad autónoma para evitar que sobrepasen el límite del 20% de vehículos que marca la normativa.

La reunión ha servido además para crear un distintivo de la licencia VTC que se tendrá que exhibir en el exterior del coche. Finalmente, se ha acordado cubrir dos nuevas plazas de inspector para reforzar el control de esta actividad.

“Ahora habrá paz, a esperar a que cumplan y a controlar que lo hagan”, ha dicho el líder sindical tras la reunión. Por su parte, el director general de Transportes y Movilidad, David Saldoni, ha destacado que esta batería de medidas aportará “seguridad jurídica” y ofrecerá “las garantías para que la norma pueda cumplirse y sea comprobable”.

En la misma línea, la presidenta del Instituto Metropolitano del Taxi (Imet) y concejal de Barcelona, Rosa Alarcón, ha destacado que dicho acuerdo supone “la normalización de las relaciones” con el sector.