Fomento tilda de “confiscatoria” la subida de impuestos

El acuerdo entre el gobierno de la Generalitat y el grupo parlamentario de Catalunya en Comú-Podem para sacar adelante los presupuestos de 2020 está cada vez más cerca. En una entrevista con la agencia Efe, el secretario general del departamento de Economía, Albert Castellanos, se ha mostrado este martes convencido de que el pacto se cerrará en enero, y ha defendido el primer acuerdo con los comunes en materia de ingresos, que implica una subida de impuestos a las rentas altas. Esta medida ha abierto tensiones en el seno del Govern, donde Junts per Catalunya expresó su malestar pese a acatar la reforma fiscal. También los empresarios se han mostrado contrarios: en un comunicado, la patronal catalana Foment del Treball ha considerado que la reforma fiscal es “abusiva y confiscatoria”.

Cuando el año pasado Govern y comunes intentaron pactar unos presupuestos, el fracaso estaba anunciado, y lo escenificaron al llevar al Parlament un proyecto que no había sido negociado, y que ni se votó. Esta vez, sin embargo, las conversaciones han sido discretas y ambas partes anunciaron la semana pasada un acuerdo en el primer capítulo, el de los ingresos, el primer paso para negociar el capítulo de gastos.

Este principio de acuerdo no ha evitado que el Govern haya tenido que aprobar un decreto para aplicar, a partir del 1 de enero, la prórroga automática de los últimos presupuestos que aprobó el Parlament, los de 2017. “Es un decreto temporal hasta que se aprueben los nuevos presupuestos”, dijo el lunes, en rueda de prensa, la portavoz del Govern, Meritxell Budó. En el gobierno de Quim Torra dan por hecho que las Cuentas saldrán adelante, y que el pacto se cerrará pronto. “A mediados de enero”, ha concretado Castellanos, que destaca que “no hay ningún asunto que suponga hoy por hoy un escollo para llegar a un acuerdo final”.

El acuerdo sobre la subida de impuestos, sin embargo, ha hecho aflorar las tensiones en el Govern, donde los neoconvergentes no están de acuerdo con las dos principales modificaciones del sistema fiscal. Estas son ampliar la presión fiscal a las rentas altas subiendo el tipo marginal del IRPF en Cataluña; y recuperar parte del Impuesto de Sucesiones que fue casi eliminado por el gobierno de Artur Mas.

A las críticas de los herederos de Convergència se suman las de los empresarios. En un comunicado, Foment del Treball ha expresado su “gran preocupación” por la subida de impuestos, que a su juicio “perjudican una fiscalidad competitiva ante el resto de comunidades autónomas”. La reforma permitirá a las arcas públicas aumentar sus ingresos en 543 millones más al año, aunque la recaudación para 2020 será menor, dependiendo de cuando entrarán en vigor las nuevas Cuentas.

Algunos de los acuerdos que están más avanzados en materia de gastos, según ha avanzado Castellanos, hacen referencia al gasto público en guarderías y en listas de espera sanitarias. Según los comunes, para las guarderías el acuerdo es pasar de cero euros públicos a destinar 70 millones de euros en 2020. También está previsto rebajar un 30% las tasas universitarias.