80 medidas para borrar en cuatro años el Madrid de Carmena

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El popular José Luis Martínez-Almeida es el nuevo alcalde de Madrid gracias a los votos de Ciudadanos y de la extrema derecha. Para conseguir estos apoyos, el equipo del PP ha firmado con ciudadanos un texto de 80 medidas y otro de organización de la Administración —los puestos de poder en concejalías y distritos— con Ciudadanos y ha cerrado otro acuerdo programático con Vox (81 medidas, en este caso). [PDF descargables: Texto íntegro del acuerdo PP- Cs  | Acuerdo de estructura de la Administración PP-Cs | Texto íntegro del acuerdo de PP y Vox]

La vicealcaldesa Begoña Villacís (Cs) cree que las medidas acordadas les "comprometen", en su gobierno conjunto, a modo de contrato para los próximos cuatro años. Sin embargo, hay ciertas diferencias entre los acuerdos firmados por Almeida con cada uno de los partidos, como el hecho de que en el texto acordado con Vox no haya mención explícita a la violencia de género o las opciones para el futuro de Madrid Central. En cualquier caso, lo que se plantea es una enmienda a la totalidad de los dos partidos a la gestión de Manuela Carmena. Estas son las medidas más significativas de cada uno de los acuerdos bilaterales del PP.

Acuerdo PP-Ciudadanos

- Reconvertir Madrid Central. Es una de las grandes incógnitas y no queda del todo despejada. El texto habla de reconvertir el área de acceso restringido a vehículos contaminantes, la mayor apuesta del mandato de Carmena, para crear “nuevas áreas de prioridad residencial aportando soluciones alternativas y complementarias de movilidad a todos los sectores de la población”. Lo harán, aseguran, tras un proceso de consulta con “los sectores afectados”. También quieren simplificar “la gran complejidad y dificultad para su gestión práctica”. Para empezar, aprobarán una moratoria para las multas desde el 1 de julio y realizarán una auditoría del sistema de control de acceso.

- Bajar y devolver impuestos. Como se preveía, los dos partidos han acordado recortar el IBI al mínimo legal, el 0,40%, del 0,51% actual al que lo rebajó Carmena. También ampliarán la bonificación a la cuota del IBI por la instalación de sistemas de aprovechamiento energético, reducirán el impuesto de construcciones, instalaciones y obras (ICIO), y el de actividades económicas (IAE). Bonificarán además al 95% la plusvalía en donaciones y herencias de viviendas entre parientes directos y devolverán a los madrileños el “dinero que injustamente han tenido que pagar por la plusvalía municipal cuando han perdido dinero en la venta de su vivienda o inmueble”.

- Aprobación urgente de Madrid Nuevo Norte. Era uno de los proyectos estrella del Ayuntamiento de Ahora Madrid y de los que más crisis generó en el grupo municipal. Todo estaba listo para su aprobación, pero el informe preceptivo sobre impacto medioambiental de la Comunidad de Madrid llegó en vísperas de las elecciones y Carmena decidió no convocar un pleno extraordinario en esas circunstancias. PP y Cs se comprometen ahora a aprobarlo con carácter urgente. También dicen que sacarán “del cajón del olvido” proyectos urbanísticos “paralizados por el anterior gobierno por puro sectarismo ideológico” e impulsarán los desarrollos del sureste.

- Protección a la Policía Municipal. En su intento de modernizar el cuerpo, los choques entre la Policía Municipal y la corporación de Carmena fueron notorios. Los nuevos gobernantes de la ciudad darán marcha atrás en medidas como las instrucciones policiales para no intervenir contra manteros si la seguridad no está garantizada. También dotarán de más recursos a la policía para combatirlos, por el “perjuicio” que dicen que “causan al comercio y a la imagen de la ciudad”. Además, acabarán con el plan de identificaciones policiales eficaces, que Carmena importó de otras ciudades donde se intenta evitar que los agentes paren a los ciudadanos y les pidan la documentación por su perfil étnico.

“Recuperación” de barrios frente a la okupación. Los nuevos dirigentes del palacio de Cibeles se proponen “recuperar” barrios, como Lavapiés, “cuya degradación ha llevado a las más altas cotas de inseguridad”. Instalarán cámaras de seguridad y crearán una oficina de defensa de los derechos de los vecinos donde darán asesoría jurídica a “las personas afectadas”.

- Soterrar la A-5. Aunque el documento no menciona expresamente la retirada de los semáforos de la A-5 a los que se han opuesto tanto PP como Cs, sí promete soterrar esta vía en su tramo urbano. Además, anuncia la creación de nuevos espacios públicos en la zona y la recuperación del cinturón ecológico del eje Arroyo Meaques-Retamares con la Casa de Campo.

- Plan contra la suciedad. Pese a los contratos heredados por Carmena de la etapa de Ana Botella, se proponen reforzar los servicios de limpieza con un plan especial que pondrán en marcha en sus primeros 100 días de mandato. Aseguran también que aumentarán el presupuesto y el control.

Acuerdo PP-Vox

- Emigración. PP y Vox prometen impulsar un plan que “facilite la integración de los inmigrantes legales mediante un mayor aprendizaje de la cultura, la historia, la lengua y las tradiciones españolas, así como el conocimiento de la ciudad”. Al tiempo, su documento coincide con el firmado por PP y Cs en el endurecimiento de la lucha contra la venta ilegal callejera de los manteros.

- Violencia de género. Al contrario que el documento firmado por PP y Cs, donde sí se menciona la lucha contra esta lacra, el acuerdo de PP y Vox no recoge ninguna política para combatir los asesinatos de mujeres. Sí habla, sin embargo, de “violencia en el ámbito intrafamiliar”, el concepto con el que el partido de extrema derecha iguala las agresiones machistas con el resto de las que se producen en el núcleo familiar. “Estableceremos un plan municipal de educación contra todo tipo de violencia en el ámbito intrafamiliar y colaboraremos con los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, Administraciones Públicas, y organizaciones civiles, con el objetivo común de prevenir agresiones, perseguir a los agresores y ayudar a todas las víctimas de esa violencia”, dice el pacto.

- Soterrar la Gran Vía. Al contrario que el acuerdo de PP y Cs, que habla de modificar o reformar Madrid Central, el del PP con Vox explicita la voluntad de “acabar con la política de prohibiciones y restricciones de los últimos cuatro años de Madrid Central, recuperando la libre circulación en las vías estructurantes”. Y, además, plantea: “Se estudiará la viabilidad técnica y económica del soterramiento de la Gran Vía, como vía de circulación alternativa y aparcamiento subterráneo”.

- Fiestas. Los dos partidos acuerdan promocionar dos festividades de raíz católica, la Navidad y la Semana Santa, “como manifestaciones públicas del sentir mayoritario de los españoles, de acuerdo a las costumbres y tradiciones milenarias”.