Repsol renueva la cesión, por diez años más, de 41 obras al Macba
Antonio Brufau y Ainhoa Grandes ratifican su alianza de 1998
Antoni Tàpies presentó en el Pabellón Español de la Bienal de Venecia de 1993 su obra Rinzen (Súbito despertar en japonés), una instalación en la que el artista protestaba contra la guerra y la violencia en un momento en el que Yugoslavia vivía un conflicto fratricida. Con ella Tàpies obtuvo el León de Oro honorífico de la Bienal. Seis años más tarde, en 1998, el propio artista instalaba la obra en el vestíbulo del Macba después de que la comprara Repsol poco tiempo antes por algo más de 421.000 euros como dación en pago.
Esta donación permanente, que une las tres plantas del edificio y recibe al visitante cuando entra al hall del museo del Raval, fue el primer capítulo de una larga relación entre el museo, representado por la Fundación Macba, y la Fundación Repsol que este viernes vivió su último capítulo con la firma entre sus máximos representantes, Ainhoa Grades y Antonio Brufau, de la renovación por diez años más (renovables otros diez) del depósito de 41 obras de arte que durante dos décadas la empresa energética ha depositado en el Macba, después de invertir un total de 1,5 millones de euros.
Las obras realizadas por 20 artistas diferentes, como Ignasi Aballí, Constant, Rodney Graham, Richard Hamilton, Antoni Miralda, Antoni Muntadas, Xabier Salaberria o Allan Sekula, entre otros, están entre “las más expuestas y significativas” de la colección, según la directora de la fundación Cristina López. Pese a que ahora en la permanente se exponen solo cuatro. “Esta colaboración de tantos años nos ha ayudado y hecho crecer", aseguró Grandes tras remarcar que la compañía creó en el Macba desde el primer momento promoviendo dos ejes centrales como son la creación de patrimonio y el apoyo de proyectos educativos y sociales.
Grandes explicó que la colaboración continuó en 2015, cuando amplió su compromiso con el Programa de Accesibilidad, cuyo objetivo era acercar el arte contemporáneo a todos los públicos, algo de lo que Brufau dijo sentirse especialmente orgulloso. “Estoy particularmente contento de este plan que hacer llegar el arte a colectivos con diversidad funcional y otras capacidades, después de que Repsol haya puesto el acento en la atención de estos colectivos”, explicó Brufau tras recordar el ejemplo que ha seguido de Josep Vilarasau (que asistió a la firma junto a otros patronos del Macba) y Leopoldo Rodés, ya fallecido.
En cuanto a la polémica sobre la ampliación del Macba en la Misericordia y preguntado al director del museo, Ferran Barenblit, por la protesta ante el centro el pasado sábado bajo el lema “El Macba daña la salud” se limitó a decir: “Fue el mismo dia en el que el Macba fue el museo más visitado de la ciudad”.
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