Santi Vila pide los 50.000 euros de su fianza por “extrema necesidad”

El exconsejero de Cultura Santi Vila ha pedido al Tribunal Supremo que le devuelva la fianza de 50.000 euros que abonó en su día para eludir el ingreso en prisión. Vila, uno de los 12 líderes independentistas juzgados en el Tribunal Supremo por su papel en el procés, asegura que se encuentra en una "situación económica de extrema necesidad". La culpa es, precisamente, del juicio, que le obliga a unos elevados gastos y le impide trabajar.

En su petición al Supremo, el abogado Joan Segarra recuerda que Vila debe "sufragar los cuantiosos costes de desplazamiento, alojamiento y manutención en Madrid" en un juicio que dura ya casi dos meses y que, previsiblemente, se alargará al menos otros dos. El exconsejero, que se desmarcó del Govern de Carles Puigdemont cuando este decidió impulsar la declaración unilateral de independencia (DUI) alega también que debe afrontar los "costes legales de su defensa". Y lo hace solo porque no tiene "ayuda" ni "apoyo económico" de ningún tipo.

Además de gastar mucho, Vila no tiene apenas ingresos, alega su abogado. Su asistencia al juicio ha disminuido de forma "relevante" sus ingresos porque ha tenido que reducir de forma "drástica" su actividad laboral. Vila ha tenido que suspender las clases que impartía como profesor de la Universitat Ramon Lull. Y apenas puede acudir un día o dos por semana a su trabajo como director de una empresa de aguas en Banyoles (Girona).

El abogado insiste en que no hay ningún riesgo de fuga y que, por tanto, no hay motivos para mantener la fianza que se impuso a Vila en noviembre de 2017. El exconsejero asegura que, si se le devuelve la fianza, utilizará ese importe para "sufragar los elevados costes" de acudir a las sesiones.