Tardà apuesta por facilitar un gobierno de Sánchez si ERC gana en Cataluña

Joan Tardà, uno de los líderes de Esquerra Republicana (ERC) que ha tenido la voz cantante en el Congreso en la pasada legislatura, cree que el apoyo a Pedro Sánchez si ERC es la fuerza ganadora en Cataluña es una posibilidad a tener en cuenta. En un tuit del político republicano describe los posibles escenarios tras las elecciones del 28 de abril. El primero, “un gobierno de ultraderecha nacionalista español”. El segundo, “un gobierno de centro-derecha nacionalista español fruto de un pacto entre PSOE y Ciudadanos”. Y, el tercero, un gobierno PSOE- Podemos: “Si en Catalunya ERC gana, las dos primeras opciones no serán posibles".

De alguna forma, Tardà, que no está en la lista de su partido al Congreso, sí se pronuncia a favor de que los republicanos tiendan un puente a un posible gobierno de izquierdas. Una opción que desde la órbita de JuntsxCat se aventura más remota en función de la configuración de la lista de ese partido al Congreso, encabezada por el preso Jordi Sánchez y seguida por Laura Borràs, y por el posicionamiento público de esa formación en contra de facilitar las cosas a Pedro Sánchez, al que negaron el apoyo en los no natos presupuestos. ERC también rechazó los Presupuestos pero está enfocando su campaña en una línea menos partidaria del bloqueo institucional.

En cuanto a posibles pactos, Meritxell Batet, candidata del PSC por Barcelona, sin vetar una combinación con Ciudadanos, apuntó que los valores de las políticas de izquierdas socialdemócratas “son más fácilmente compartidos por las fuerzas políticas que se llaman a si mismas de izquierdas”. La ministra de Política Territorial y candidata cree que los socialistas tienen que pelear todos los votos —lo harán llamando a la movilización y una campaña que quiere abarcar todo el territorio— y relativiza las encuestas que, por ahora, proyectan a un PSC que podría llegar a tener la victoria en Catalunya a costa de los electores que confiaron en los comunes en las legislativas de 2016 —fue el partido ganador— y, en parte, de sufragios de independentistas defraudados por la evolución del procès o que prefieren votar PSC para evitar un posible gobierno de España del bloque de las derechas.

Los socialistas catalanes no quieren ponerse ningún techo —el mejor resultado lo obtuvieron en 2008 con 25 diputados— y entienden que lo que está en juego es el debate de derechas o izquierdas: “Estamos convencidos de que será la dicotomía, la de unos valores u otros en las generales y también lo será en Cataluña. No creo que la cuestión sean los bloques de independentistas o contrarios”, añadió Batet. “Claro que hablaremos con todas las fuerzas políticas, pero intentaremos no depender de ninguna de ellas", zanjó.