Uber y Cabify amenazan con dejar Barcelona por las cesiones al taxi
Los taxistas decidirán si mantienen el paro o lo desconvocan este miércoles tras cinco días colapsando Barcelona
La Generalitat cedió este martes a la presión de los taxistas, que culminaron su quinto día consecutivo de huelga en Barcelona, y, en un acuerdo con el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), institución que preside la alcaldesa Ada Colau y que suma 36 municipios y más de tres millones de habitantes, aceptó modificar la normativa de las licencias de los vehículos de transporte concertado (VTC). El decreto que prepara el Govern restringirá las condiciones de servicio de las empresas que las operan, Uber y Cabify. Su punto más crítico implica que el área de Barcelona podrá obligar a que los clientes de los VTC deban contratarlos con al menos una hora de antelación. Tras conocer la medida, la patronal de los VTC amenazó con marcharse de la capital catalana.
Cataluña es la primera comunidad que ha empezado a elaborar un decreto propio que regule las licencias de los vehículos de transporte concertado (VTC), después de que el Gobierno traspasase en septiembre las competencias en este ámbito a las comunidades autónomas. La solución que la Generalitat proponía hasta este martes desagradaba tanto a los taxistas como a las empresas que operan con las licencias VTC, hasta el punto de que los primeros se hallan en huelga desde el pasado viernes, periodo en el que han bloqueado la Gran Via barcelonesa, una de las principales arterias de la ciudad.
Tras cinco días de conflicto enconado, el consejero catalán de Territorio, Damià Calvet, trató el martes de alcanzar un consenso en el sector y se reunió con los representantes del gremio del taxi, de la AMB y de las empresas de VTC. La propuesta de decreto que la Generalitat presentó el viernes, que desató la indignación de los taxistas, establecía que los VTC debían ser reservados al menos con 15 minutos de antelación. Esta medida pretende diferenciar su servicio, en el que la precontratación es un imperativo legal, de la actividad del taxi, que se basa en la inmediatez de coger cualquier vehículo en la calle. Este cuarto de hora resultaba insuficiente tanto para los taxistas como para la AMB, que reclamaron que el margen para la precontratación se ampliase a una hora.
Calvet aseguró en la tarde del martes que, tras un acuerdo alcanzado con el ente metropolitano, el decreto que prepara incluirá esa demanda. Aunque el Govern obligará en el conjunto de Cataluña a precontratar los VTC con esos 15 minutos de plazo, el texto abrirá la puerta a que la AMB amplíe ese margen hasta una hora, en atención a los criterios (ambientales, territoriales y de duración del viaje) que figuraban en el decreto del Ejecutivo central.
La patronal Unauto-VTC, cuyos vehículos también han estado protestando estos días y que han bloqueado la avenida Diagonal, uno de los principales accesos de Barcelona, salió en tromba contra la decisión de la Generalitat y amenazó con que Uber y Cabify dejarán de prestar sus servicios en la ciudad si sale adelante con esa previsión el decreto.
La patronal interpretó la decisión de la Generalitat como un ataque frontal. “Ha cedido ante el chantaje del taxi. Los VTC abandonaremos Barcelona. El taxi ha ganado”, dijo a última hora Josep Maria Goñi, presidente de Unauto-VTC en Cataluña. Marta Plana, directora de regulación de Cabify en España, opinó que “el decreto obliga a las empresas a cerrar”. Sin embargo, Cabify matizó más tarde estas palabras y aseguró en un comunicado que todavía no ha tomado ninguna decisión. Uber se pronunciará este miércoles.
Los taxistas volvieron a tomar la capital catalana en su quinta jornada consecutiva de huelga para reivindicar sus demandas y colapsaron el centro con miles de vehículos aparcados en arterias como la Gran Via, que obligaron a desviar numerosas líneas de autobuses.
Los representantes del sector del taxi salieron relativamente satisfechos tras la reunión con el consejero por la posibilidad que se abre de que los VTC tengan que ser reservados al menos una hora antes. Los taxistas se reunirán hoy en asamblea para decidir si mantienen o abandonan la protesta.
Durante todo el día, los conductores de taxis se manifestaron por distintas calles céntricas de Barcelona, lo que obligó a cortar el tráfico en algunas zonas. A primera hora, celebraron una asamblea en la plaza de Catalunya, donde un portavoz de Élite Taxi anunció que han conversado con colegas de Bruselas para que protesten ante la bautizada como Casa de la República, la residencia del 'expresident' Carles Puigdemont.
Unas decenas de taxistas cortaron la calle de Aragón, donde reventaron cristales, abollaron puertas y pincharon ruedas de algunos VTC. Minutos más tarde, los manifestantes emprendieron una marcha hasta la plaza de Espanya, donde se concentraron impidiendo la circulación de vehículos. Un grupo de ellos cortaron un acceso por la Gran Via, y se registraron momentos de tensión con otros conductores y con varios VTC.
Los Mossos d’Esquadra investigan unas 70 denuncias por ataques a coches con licencias VTC y enfrentamientos entre taxistas y agentes policiales desde que empezaron las protestas.
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