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Detenido por querer matar a Pedro Sánchez el hijo del último alcalde franquista de Rubí

El hombre, vigilante de seguridad de Terrassa, amagó con atacar al presidente del Gobierno tras el anuncio de la exhumación de Franco

Arsenal de armas incautado al detenido por idear atentar contra Sánchez.Foto: atlas
Rebeca Carranco

Los Mossos d’Esquadra han detenido a un hombre que pretendía atentar contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. El arrestado, Manuel Murillo Sánchez, vigilante de seguridad de 63 años, es hijo del último alcalde franquista de Rubí (Barcelona), según confirman fuentes policiales. Se le investiga por amenazar en un grupo de WhatsApp con atacar a Sánchez después del anuncio del Gobierno de que serán exhumados los restos de Franco del Valle de los Caídos, según ha avanzado el diario Público. Está imputado por delitos de conspiración para atentar contra autoridad con uso de arma, por amenazas graves, tenencia ilícita de armas, municiones y explosivos y un delito de odio.

Los Mossos le detuvieron el pasado 19 de septiembre, después de la denuncia de una de las integrantes del chat, una dirigente local de VOX, después de que le pidiese apoyo logístico para matar a Sánchez. En su casa en Terrassa (Barcelona) encontraron 16 armas, largas y cortas. El hombre tenía licencia y es un experto tirador. Una portavoz del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña ha confirmado que se encuentra en prisión provisional comunicada y sin fianza.

El detenido, competidor de tiro y defensor del franquismo, no tenía antecedentes por actos violentos ni llegó a avanzar en sus planes de atentado. Murillo fue campeón de España de 100 kilómetros durante cuatro años (1993-96) y compitió en las grandes citas internacionales, concretamente en dos campeonatos de Europa y seis ediciones de la Copa del Mundo de su especialidad. Los Mossos le atribuyen un perfil obsesivo, que decidió dar un paso más cuando el Gobierno de Sánchez anunció su intención de exhumar a Franco. "No tiene ningún problema mental", subrayan fuentes policiales.

Los Mossos le atribuyen una "clara intencionalidad" y la "voluntad" de matar al presidente del Gobierno. En los diversos whatsapps en los que lo dijo, buscaba ayuda logística: poder conocer la agenda del presidente, alguien que le dejase un piso, que le ayudase en la huida... "Manifiesta que está dispuesto a hacer el sacrificio por España y que no le importan las consecuencias, como la detención o el ingreso en prisión", ha explicado el portavoz de los Mossos, el inspector Albert Oliva, en rueda de prensa.

Los agentes le detuvieron en el portal de su casa, el lugar que consideraron más seguro, menos de una semana después de haber recibido la denuncia, según fuentes policiales. "El objetivo era actuar con la máxima rapidez y discreción", ha indicado Oliva. Los Mossos no le vinculan colectivo político de extrema derecha: "Su acción, actitud, voluntad es a nivel individual". Tampoco había avanzado en sus planes para acabar con la vida del presidente.

El Juzgado de Instrucción número 3 de Terrassa se ha hecho cargo del caso. Murillo sigue en prisión preventiva, que ratificó posteriormente la Audiencia de Barcelona. El hombre alegó, en su petición para ser liberado, que tenía un trabajo fijo, familia, arraigo y que los comentarios los hizo en "el contexto de la problemática política ocurrida en Cataluña". 

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Sobre la firma

Rebeca Carranco
Reportera especializada en temas de seguridad y sucesos. Ha trabajado en las redacciones de Madrid, Málaga y Girona, y actualmente desempeña su trabajo en Barcelona. Como colaboradora, ha contado con secciones en la SER, TV3 y en Catalunya Ràdio. Ha sido premiada por la Asociación de Dones Periodistes por su tratamiento de la violencia machista.

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