Los políticos presos promocionan el partido de Puigdemont entre las bases del PDeCAT
El líder neoconvergente, David Bonvehí, insiste en que se mantendrá al margen de la fundación de La Crida
Los políticos del PDeCAT en prisión preventiva por el procés han salido a intentar mediar entre los promotores de La Crida Nacional per la independencia, el partido que promueve el expresidente Carles Puigdemont y su entorno, y la dirección del PDeCAT. David Bonvehí, el líder neoconvergente, expresó el pasado lunes sus dudas sobre que ambas formaciones compitan ideológicamente. Este sábado, La Crida comienzan su proceso fundacional en una convención en Manresa y Josep Rull, Jordi Turull y Quim Forn ha apoyado la iniciativa y han pedido la implicación de las bases de la antigua Convergència.
"Os animamos a implicaros y participar desde su inicio en la Crida. Nosotros estamos, con el mismo compromiso con el que somos asociados del PDeCAT. Una cosa nos lleva a la otra", dice la misiva enviada por los políticos presos y también firmada por Lluís Puig, huido de la justicia española en Bélgica. EL texto fue adelantado por el diario Ara.
La petición de los líderes en prisión preventiva por un supuesto delito de rebelión y malversación da alas a la puesta de largo de la Crida, que en los últimos días se había ido desinflando. Tras el acto y el manifiesto de presentación de la formación, el pasado julio, sus portavoces han ido cambiado el calendario de fundación y presentación y han dejado en el aire que concurran a las elecciones municipales y europeas del próximo año. En Manresa se presentarán a los fundadores –que tienen que aportar una cuota de al menos cinco euros- los borradores de las ponencias organizativa e ideológica. Los organizadores no han revelado cuántas personas se han inscrito hasta el momento.
Fuentes neocovergentes aseguran que ha habido insistentes peticiones por parte del entorno de Puigdemont a alcaldes del PDeCAT para que asistan al acto de Manresa. Bonvehí ha explicado en varias ocasiones que considera que tiene sentido adherirse a la Crida si es un gran paraguas del independentismo, pero pone en duda su efectividad si solo se limita a acoger personas de la antigua Convergència. El presidente de partido, de momento, considera que tiene que ser neutral en el proceso de fundación. Con todo, las bases tienen que votar si apoyan el modelo de colaboración entre el PDeCAT y la Crida. Un comité, precisamente formado por los presos, es el que tiene que definir cómo sería esa confluencia.
La carta insiste en que la Crida "responda y se enmarque en la necesidad de disponer de un gran instrumento de expresión mayoritaria, de un movimiento político absolutamente transversal que recoja el espíritu de unidad y de país" que hizo posible el 1-O. Tanto la CUP como Esquerra se han negado a participar.
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