Tres jóvenes alados listos para migrar

El halcón peregrino es un ave migratoria que no conoce fronteras. Con los cambios estacionales recorre miles de kilómetros, pero suele criar cerca del lugar donde nació. Para conocer sus movimientos, SEO BirdLife ha anillado este martes tres ejemplares de esta rapaz incluido en el Catálogo de Especies Amenazadas de la Comunidad. Los polluelos salieron del cascarón hace 25 días en la caja-nido que la organización ornitológica instaló hace una década en la planta 21 del hospital Gómez Ulla, pero hacía tres años que sus padres no se reproducían en ella.

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La muerte de la hembra en 2015 obligó al halcón macho a buscarse otra pareja. El año pasado no pudo criar porque otro ejemplar utilizado para la cetrería okupó el nido. Capturaron al intruso en febrero, después de un año y muchos intentos. La nueva pareja de halcones volvió a la caja y creó una familia. Nacieron cuatro polluelos, pero uno no salió adelante. Los que han sobrevivido han sido marcados antes de que, en apenas tres semanas, echen a volar. Los técnicos los han presentado envueltos en sábanas para evitarles el estrés. Luego les han colocado una caperuza que les evitó las vistas de Madrid que se otean desde la azotea del hospital.

Los graznidos de las pequeñas rapaces se han propagado por el cielo de la capital, donde solo habitan ocho parejas de las 38 censadas en la región. La mayoría se localizan en la sierra de Guadarrama y en los cortados fluviales de los ríos Jarama, Henares y Tajo. Para no perder detalle, los técnicos han tomado a los polluelos del Gómez Ulla con delicadeza, los han colocado en una mesa larga y, uno a uno, les han puesto dos anillas en su pata izquierda. Una es de acero, la otra de PVC. “Es de color amarillo para favorecer la lectura a distancia. Estos ejemplares ya no se vuelven a capturar”, ha explicado Juan Carlos del Moral, coordinador de seguimiento en SEO BirdLife.

Pruebas veterinarias

Los distintivos son una especie de pasaporte para los halcones. Con ellos, cuando viajen y sean avistados en otro país, cualquier persona puede saber de dónde vienen y en qué lugar han nacido. En España se puede descubrir a través de la web www.anillamientoseo.org. “El objetivo final es conservar las especies. Las aves migratorias se trasladan por todo el mundo y conectan a los países”, ha explicado Ana Bermejo, coordinadora de Migra. El programa fue creado en 2011 para controlar al detalle los movimientos de las aves, sus lugares de parada, los puntos de alimentación y el tiempo que tardan en realizar las rutas.

El anillamiento se ha convertido en una fiesta previa al Día Mundial de las Aves Migratorias, que se celebra el sábado. También ha servido para que la veterinaria Francisca López, de Brinzal, extraiga sangre de los polluelos, dos hembras y un macho que han pesado casi un kilo. Con las muestras elaborará exámenes bioquímicos que determinarán el estado inmunitario de las rapaces, que no serán adultos y podrán procrear hasta los tres años. Antes de devolverles al nido, se les ha suministrado una pastilla para evitar que se contagien con la tricomoniasis, una enfermedad mortal que transmiten otras aves como las palomas. “Se les forman unas placas en la garganta y no pueden tragar comida ni respirar”, ha explicado la bióloga Arantxa Leal.