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Transporte ferroviario

El AVE llega hoy a Castellón con Mariano Rajoy a bordo y la ausencia de Compromís

La formación considera una "burla" el AVE que hoy inaugura el presidente del Gobierno

El AVE saliendo de Valencia.
El AVE saliendo de Valencia.José Jordan

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna inauguran hoy el primer trayecto del AVE entre Madrid y Castellón, que iniciará mañana martes y con cuatro trenes diarios los viajes comerciales tras diez meses de pruebas. Todo, en una jornada que cabalgará entre las alabanzas del ejecutivo central por el estreno de la infraestructura ferroviaria, la acogida positiva pero “contenida” del tejido empresarial valenciano y las críticas de Consell por el retraso acumulado y la falta de planificación de lo que califica como "pseudo AVE". Y que deberá esquivar también protestas, la ausencia de Compromís y las "luchas" por la atribución de méritos.

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La demora en la llegada del AVE (2007 fue la primera fecha barajada por Fomento, pospuesta luego a 2014 por el ministro socialista José Blanco) y el modo en que lo hará (a través del tercer hilo y no con plataforma reservada) son los argumentos que entonan los sectores críticos. En el caso de Castellón, el AVE compartirá vías con trenes de cercanías, mercancías y líneas de velocidad media y alta (Alaris y Euromed) hasta Valencia. Al menos hasta 2022, cuando está proyectada la segunda plataforma de ancho internacional. La ausencia de la misma en el tramo Castellón-Valencia impedirá que circule a más de 160 kilómetros por hora (el AVE lo hace a más de 300 km/h), como han señalado en varias ocasiones desde el tejido empresarial valenciano. Los usuarios de los trenes de cercanías temen por su parte nuevas afecciones en la fluidez de las líneas.

Las asociaciones empresariales de la Comunidad Valenciana han recibido la noticia de la puesta en marcha del AVE con optimismo, pero sin excesos. Dicen que llega “tarde” y “con parches”. Y aunque ven la infraestructura necesaria, reivindican la doble vía como solución definitiva. Los mismos argumentos esgrime el Consell, aunque para situarse en un plano con más sombras que luces. El propio secretario autonómico de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio de la Generalitat Valenciana, Josep Vicent Boira, ha pedido que no se llame AVE a lo que hoy que se inaugura en Castellón. “No se puede equiparar a las líneas convencionales de AVE en España. Es un tren que circulará en ancho internacional UIC sobre vías de ancho ibérico adaptadas y a velocidades bastante inferiores compartiendo vía con cercanías, regionales, Euromed y mercancías”.

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, estará hoy en el acto inaugural. Pero en solitario. Compromís ha anunciado que ninguno de sus cargos participará en la inauguración del “supuesto AVE” al considerar “una auténtica burla que se esté intentando vender como alta velocidad un servicio que en realidad no lo es”.

Para la presidenta del PP valenciano, Isabel Bonig, la Alta Velocidad a la provincia “es una realidad gracias al Gobierno del PP”. En la misma línea se expresa la secretaria de Política Nacional del PP de Castellón, Salomé Pradas. Atribuye el retraso del AVE al “boicot que el PSOE ha hecho siempre a esta provincia; las obras fueron anuladas por José Blanco y José Luis Rodríguez Zapatero con el silencio y la complicidad de Ximo Puig, y ha sido el gobierno de Mariano Rajoy quien lo ha construido en solitario”.

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Para la jornada de hoy y mañana también hay convocadas protestas por parte de la Plataforma de Defensa del Ferrocarril de CGT junto a organizaciones ecologistas y sociales. Sendas concentraciones reivindicarán, según la plataforma, que se anteponga “la cordura de un modelo ferroviario social, seguro, sostenible y de calidad” y mostrarán su repulsa al “modelo AVE, que lastra económicamente al ferrocarril convencional que utiliza el 96,2% de usuarios, mientras sólo recibe el 29% de las inversiones”.

Los recelos ante el AVE y las consecuencias de su puesta en marcha saltan también a las redes sociales. Los usuarios de esas líneas convencionales, como los agrupados en la Plataforma de afectados de cercanías por las obras del AVE, indican que el acto de hoy “no es para estar orgullosos”. “Rajoy y el señor ministro vendrán a hacerse la foto a Castellón el lunes. No esperéis que vengan a solucionar los problemas que han ocasionado en cercanías”, advierten.

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