El fiscal pide cuatro años de cárcel por enviar coca por correo desde Paraguay

J.M.C.F., vecino de Redondela, será juzgado este martes por la sección quinta de Pontevedra, acusado de enviar por correo desde Paraguay tres sobres que contenían unos 150 gramos de cocaína que apenas alcanzaban el 50% de pureza, pero cuyo valor en el mercado negro hubiera superado los 5.000 euros. El hombre, con antecedentes policiales, efectuó los envíos durante los meses de julio y agosto de 2016 al domicilio en el que residía su hija, en la localidad de Chapela, Redondela. El fiscal solicita para el acusado una condena de cuatro años de prisión y una multa de 10.600 euros, el doble del valor de la droga.

El acusado fue detenido un mes después de hacer los envíos por orden del juez de instrucción de Redondela encargado del caso. El pasado mes de abril, cuando la fiscalía presentó escrito de acusación contra el acusado, solicitó al juzgado que prorrogara el auto de prisión hasta la celebración del juicio.

Distribuidores de Tui

También la Audiencia de Pontevedra juzgará a otros dos presuntos narcotraficantes de cocaína y heroína, dos hermanos residentes en A Guarda que cuentan con antecedentes penales por los mismos delitos. Ambos afrontan una condena de cinco años y medio de prisión y 8.000 euros de multa por almacenar y distribuir estupefacientes desde el piso que compartían, que en caso de impago será sustituida por seis meses más de prisión para cada uno.

Se da la circunstancia agravante de que uno de ellos fue condenado en noviembre de 2013 y el otro en abril de 2015 por tráfico de drogas. De común acuerdo, dice el fiscal, ambos seguían dedicándose a la distribución a pequeña escala, “atendiendo a los pedidos de clientes” que recibían en sus teléfonos móviles. En el domicilio de M.A.M. en A Guarda, los acusados preparaban las dosis demandadas que indistintamente uno u otro entregaban a los compradores en el entorno de la fuente de la calle A Roda en plena ciudad.

En septiembre de 2016, la Guardia Civil abrió una investigación que días después concluyó con la detención de los dos traficantes. Un comprador telefoneó al acusado M.A.M., para concertar la compra de un gramo de heroína, pero le atendió la llamada su hermano L.A.A.M. Entonces cogió varias dosis de heroína y salió en dirección al punto concertado con el comprador para entregarle la droga. En ese momento fue detenido por dos agentes que le intervinieron dos bolsas conteniendo heroína y otras tres con cocaína.

Horas después, en un registro ordenado por el juzgado de instrucción de Tui, la Guardia Civil irrumpió por sorpresa en el piso que servía de almacén y laboratorio de los estupefacientes, y sorprendió a la novia de M.A.M. tirando por el wáter una bolsa 14,752 gramos de heroína con una pureza de apenas el 40 por ciento, con un valor de mercado superior a los 1.000 euros. En el mismo registro fueron localizadas ocho papelinas de heroína con y catorce de cocaína con un peso neto, además de 7.337 euros en metálico, un trozo de resina de cannabis y varias dosis de esta droga empaquetadas para su venta.