La militancia de Catalunya en Comú decide participar en el referéndum del 1 de octubre

Catalunya en Comú participará finalmente en el referéndum del 1 de octubre. La militancia del partido de Ada Colau ha tomado esa decisión en una consulta telemática celebrada esta semana. Con una participación de 3.457 afiliados —el 44% del censo— el resultado es el siguiente: 2.053 a favor de involucrarse (59,39%) y 1.404 (40,61%) en contra. Elisenda Alamany, portavoz de los comunes, llamó a participar para contrarrestar la “lamentable ola represiva” del PP, al que acusó de esconderse tras los tribunales y no dar una salida política al conflicto.

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Los comunes aprobaron en su asamblea fundacional de abril apostar por un referéndum efectivo, con reconocimiento internacional y garantías, pero de forma paulatina han ido escorando su posición en defensa de la consulta. En julio, tomaron una postura ambigua: aprobaron un documento en el que apoyaban las movilizaciones en favor de lo que denominan “derecho a decidir” aunque aplazaron su decisión final a septiembre. Xavier Domènech, coordinador del partido, ya calificó el 1 de octubre de “movilización legítima”. La dirección aprobó dos días antes de la Diada la pregunta a los afiliados: “¿Catalunya en Comú debe participar en la movilización del 1 de octubre?”. No incluía el verbo votar ante la duda de si habrá o no urnas. La respuesta, con un 60% a favor y un 40% en contra, refleja una militancia partida en dos.

Si hay una consulta quiere decir ir a votar ", ha dicho la portavoz

Alamany matizó que no reali<CS8.7>zarán una campaña electoral al uso como la que están desplegando las fuerzas independentistas, PDeCAT, Esquerra y la CUP, que han diseñado actos para todos los días. La aportación de los comunes, que tampoco pedirán el voto en un sentido u otro, será que las caras visibles del partido muestren su disposición a votar, como ha anunciado la alcaldesa Ada Colau. Además, reforzarán su discurso en favor del “derecho a decidir”, que reivindica el 80% de la ciudadanía de Cataluña.

Sin embargo, algunos integrantes de la coordinadora de los comunes sí que participarán en mítines. Sònia Farré, diputada de En Comú Podem y miembro de Anticapitalistas, por ejemplo, participó ayer en un acto con Joan Tardà (ERC) y Carles Riera (CUP) a favor del referéndum. Podem, por su parte, está realizando una nueva consulta entre las bases. Su líder, Albano Dante Fachin, intervino en un mitin con el diputado Benet Salellas (CUP) en Vic (Barcelona).

Conscientes de la división entre las bases, Alamany subrayó que respetarán a los sectores que no se sientan interpelados aunque despejó cualquier ambigüedad sobre qué quiere decir “movilizarse”. “Si hay una consulta quiere decir ir a votar”, remachó. El resultado de la consulta acentuó la desazón de los grupos contrarios a votar, que sienten cómo el partido se ha alejado de su posición inicial. Es el caso del grupo conocido como el manifiesto de los 300 que no piensa participar. Alamany dijo “desconocer” la sensación de frustración. “La decisión ha sido muy debatida y se ha podido votar”, insistió. Quedaban, en cualquier caso, pocas dudas del desenlace de la consulta después de que Colau pactara con Carles Puigdemont que se pueda votar en Barcelona y ambos firmaran una carta conjunta remitida al Rey y a Mariano Rajoy. Alamany criticó a los socialistas y les acusó de estar “calladitos” ante las “amenazas” del Estado.