Gemma Montull declara que el partido falseó facturas

Gemma Montull, hija de Jordi Montull y exresponsable de finanzas del Palau, ha ratificado los pagos a Convergència. “En un momento dado supe que ese dinero servía para pagar a un partido político”, ha afirmado la acusada, que ha accedido a confesar a cambio de una rebaja de pena que podría librarla de prisión. La fiscalía pide para ella 26 años de cárcel y podría dejar la petición en solo dos al final del juicio. Gemma Montull no ha aportado nombres de cargos del partido, pero ha detallado los métodos de pago. Ha explicado, por ejemplo, que el partido entregaba facturas falsas al Palau para justificar, ante Hacienda, comisiones en efectivo pagadas por Ferrovial.

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Hacienda investigó al Palau en 2007 por la ingente cantidad de dinero en efectivo. Parte de ese dinero era el que aportaba Ferrovial para pagar a CDC. Fèlix Millet —que tenía “todo el poder” en la institución— llamó entonces al partido para pedir “una solución”, según Gemma Montull. Al cabo de unos días, su padre, Jordi Montull, le entregó unas facturas de las empresas CBM 10 y Horencat. Siempre según su versión, esas facturas fueron entregadas por el extesorero de Convergència, Daniel Osácar. Los documentos figuran en la causa con el nombre de “factures convergents”.

“Ferrovial pasaba dinero a cambio de algo, lógicamente, pero entonces no sabía si era por obras o por campañas electorales”, ha afirmado Gemma Montull que, pese a su cargo, se ha desmarcado de toda responsabilidad en la marcha del Palau y en el pago de comisiones. “Millet se reunía con los representantes de Ferrovial y del partido. Informaba a mi padre y mi padre me informaba a mí. Yo tomaba nota para llevar el control. Millet era muy estricto y muy incisivo para saber cuándo se cobraba de Ferrovial. Era un tema que le preocupaba”, ha dicho Montull, que ha insistido en que no se ha llevado “ni un solo euro” del Palau.