El Consell inyecta 5 millones de euros por el IVA impagado del aeropuerto de Castellón
Aerocas impulsará un área logística de 2 millones de metros cuadrados en el entorno de la base aérea
La junta de socios de Aerocas -la empresa pública promotora del aeropuerto de Castellón- ha plasmado este martes la cara y la cruz de la realidad por la que atraviesa la infraestructura aeroportuaria levantada en las localidades de Vilanova y Benlloch. Por un lado, las deudas que sigue arrastrando y que han llevado a aprobar una ampliación de capital de 5 millones de euros para hacer frente al IVA impagado del aeropuerto por parte del anterior ejecutivo valenciano –incluido el de varios patrocinios deportivos-. Según el consejero de Hacienda y Modelo Económico Vicent Soler, esta decisión refleja esa “gestión deficiente del pasado que no se puede volver a repetir”.
Por otro lado, la vocación de expansión del aeropuerto, una vez recuperada parte de la reputación perdida gracias a los 140.000 viajeros que han pasado ya por la base desde su apertura en 2014 y la previsión de rozar los 180.000 este año. Con el objetivo de abrir nuevos nichos de mercado, más allá del tráfico aéreo, la junta de socios de Aerocas ha dado el primer paso para impulsar un polo empresarial de dos millones de metros cuadrados en torno a las instalaciones.
Poner freno al “tsunami financiero provocado por la desastrosa gestión del anterior Consell" es la justificación de la Generalitat para a asumir en solitario una ampliación de capital de 4.950.000 euros de la sociedad propietaria de la base aérea. Su fin, afrontar “las tensiones de tesorería causadas por los impagos de IVA que dejó como herencia el anterior gobierno”. Impagos entre los que figuran los correspondientes al IVA “de patrocinios deportivos” del aeropuerto con varias empresas. Unos hechos por los que la sociedad debe abonar otros 3,6 millones de euros como liquidación de este impuesto. Aerocas ha solicitado ya al Ministerio de Hacienda un fraccionamiento del pago.
La aportación de la Generalitat a Aerocas está contemplada en los presupuestos autonómicos de 2017, pero se ha tenido que adelantar para hacer frente a pagos no previstos en el primer trimestre del año. “En concreto, para abonar 3.087.380 euros del IVA pendiente a partir de 2014 como consecuencia de la decisión de los anteriores gestores de no abonar este impuesto a la empresa gestora del aeropuerto”, han indicado desde la Consejería de Hacienda. A estos tres millones como IVA hay que sumar la cuota anual que se abona a la concesionaria, y que este año asciende a 3.505.260 euros. El titular de Hacienda ha recordado que el contrato que firmó el anterior Consell con la empresa gestora del aeropuerto obliga a la Generalitat a abonar en nueve años 24,5 millones de euros como PPD, de los que ya se han aportado 11,2 millones.
Impulso al área logística
La junta general de socios de Aerocas ha aprobado también este martes una modificación de los estatutos de la sociedad para que recojan como objeto de la misma el desarrollo de la Zona de Actividades Complementarias (ZAC) de la base de Vilanova-Benlloch. Abarca una superficie de dos millones de metros cuadrados y Aerocas contempla su desarrollo por fases, en función de las necesidades, han informado fuentes de la Generalitat. El plan director del aeropuerto prevé dedicar esta reserva de suelo a albergar empresas de aeronáutica y logística, además de otro tipo de actividades industriales y económicas.
El director general de Aerocas, Serafí Bernat, ha señalado que el aeropuerto tiene como vocación principal el turismo, aunque ha recalcado el interés de la Generalitat en desarrollar en torno a la infraestructura “un importante polo empresarial”, de ahí que haya apuntado la conveniencia de activar la tramitación urbanística de la ZAC para atender futuras demandas.
La Generalitat invertirá 1,5 millones para rehacer el canal artificial para el vertido y drenaje del aeropuerto de Castellón. El consejero Vicent Soler ha señalado que este barranco “se ejecutó de manera deficiente y sin tener en cuenta las características del terreno sobre el que se construía” y lo ha definido como una “infraestructura ruinosa” construida de manera "negligente” sobre la que urge actuar.
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