Un informe dice que todos los partidos aprobaron proteger los símbolos franquistas de Brunete

Cristina Cifuentes, presidenta de la Comunidad de Madrid, indicó ayer que la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) de la plaza Mayor de Brunete y de los elementos que contiene, algunos de simbología franquista, fue una “decisión de la Comisión Regional de Patrimonio”, que se tomó por unanimidad. En dicho organismo están representados todos los partidos, además de otras entidades, como la Real Academia de San Fernando o el Colegio de Arquitectos.

PSOE y Podemos mostraron ayer su indignación y explicaron que el consejo es un órgano consultivo, donde no se aprobó en ningún momento la declaración de BIC de la plaza . Ambos puntualizaron que nunca otorgarían semejante protección a elementos destinados a exaltar el franquismo.

Un informe firmado por Alicia Durántez de Irezábal, la secretaria del Consejo Regional de Patrimonio Histórico, sostiene que todos los representantes de los partidos políticos y de otras instituciones en el órgano “dieron su conformidad por unanimidad” a someter a trámite de audiencia (información pública) el expediente para declarar BIC la plaza mayor de Brunete y sus elementos, entre ellos los símbolos franquistas que contiene: dos placas y un escudo preconstitucional.

En una de las lápidas se recuerda la inauguración de la plaza por Francisco Franco en 1946, y en otra, la batalla de Brunete. También existe un escudo preconstitucional en la fachada de la Casa de la Falange, donde ahora se ubican dependencias municipales.

Tanto PSOE como Podemos niegan haber aprobado ese punto y acusan al PP de inventarse la resolución “Jamás lo hicimos. Están mintiendo”, dicen. La diputada de Ciudadanos, Esther Ruiz, que representa al partido en el consejo corrobora que no se votó ese punto.

El documento, firmado por la secretaria del consejo al que ha tenido acceso EL PAÍS, indica que el 1 de marzo de 2016 se reunió el consejo para tratar diferentes temas. “Se trató como quinto punto del día”, dice.

Tras la exposición, el Consejo Regional mostró su conformidad con la citada resolución “por unanimidad de todos los presentes”, aclara la secretaria.

“Nada más lejos de la realidad, se trata de un órgano consultivo y no se votó nada de la plaza”, aseguran desde Podemos, partido representado por un técnico en el consejo. Únicamente se votó a mano alzada si el teatro Albéniz se declaraba bien de interés patrimonial o cultural. “Nos sentimos completamente manipulados, porque nosotros nunca declararíamos Bien de Interés Cultural ningún monumento franquista”, dicen. La sesión del órgano fue la primera, y la única, que se ha convocado en la legislatura y por urgencia.

Desde el PSOE no dan crédito a lo que ocurre. “Cristina Cifuentes no respeta el patrimonio histórico y en el caso de Brunete se ha servido de una maniobra para no aplicar la Ley de Memoria Histórica”, sostiene Ana García D’Atri, su portavoz de Cultura en la Asamblea.

Moción municipal

A la parlamentaria le parece increíble que digan “que nosotros hemos aprobado mantener las placas y el escudo preconstitucional”. Los socialistas de Brunete llevan años pidiendo que se retiren los elementos franquistas. Incluso presentaron en febrero de 2014 una moción municipal en la que exigían al alcalde que cumpliera la ley y que quitase las placas. El PSOE también mostró su oposición a la medida en la Asamblea.

La moción salió adelante con los votos de los siete ediles de la oposición: tres socialistas, dos de IU y dos de UPyD, con lo que obtuvo el respaldo de la mayoría del pleno. Los seis concejales del PP se abstuvieron. “Dos años después no solo no se ha cumplido el mandato del pleno, sino que se les ha otorgado la máxima protección”. Otra cuestión es la plaza y la iglesia. “Nos parece perfecto que se garantice la conservación de esa zona del pueblo mediante un BIC”, declara D’Atri.