El presidente de Extremadura acepta la singularidad pero sin desigualdad

El presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha dicho hoy que no le importaría que la Constitución reconociese singularidades de terminadas comunidades pero "siempre que eso no suponga desigualdades". Fernández Vara ha hecho estas declaraciones tras reunirse con el lehendakari, Iñigo Urkullu, en Vitoria, en el marco de una visita privada al País Vasco. El presidente extremeño ha recordado que el PSOE está abierto a abrir un período de reflexión para estudiar una reforma de la Constitución. Ante los medios de comunicación, Fernández Vara ha sido preguntado sobre unas declaraciones del nuevo presidente del Consell de Mallorca, Miquel Ensenyat (Més), críticas con el sistema de financiación autonómico. En una entrevista que hoy publica el diario "El Mundo", Ensenyat critica que "los niños de Extremadura y de otras comunidades van a la escuela con la tablet" mientras los de Baleares asisten "con las mismas pinturitas de hace 30 años".

El presidente de Extremadura ha opinado que en España "sobra gente así" y ha considerado que sus palabras "ponen de manifiesto que cuando no se tienen razones se busca la sinrazón". Asimismo, ha replicado que si en Extremadura los escolares tienen dispositivos electrónicos en las aulas es porque "en su día se aplicó un impuesto a los depósitos bancarios, a las nucleares, a las eléctricas, a los solares sin edificar". Por tanto, "no nos las han pagado los del Consell de Mallorca", ha advertido, y ha lamentado que "se simplifiquen los debates y se mienta a conciencia para intentar arañar un puñado de votos". En cuanto a la reforma de la Constitución, se ha mostrado a favor de que ésta recoja singularidades de la arquitectura institucional del país. "No me importa que la Constitución pueda marcar diferencias por singularidades, siempre que no se transformen en desigualdades en derechos y en deberes", ha apuntado.

Extremadura ha superado el objetivo del déficit"

En este sentido, se ha preguntado si es necesario que todas las comunidades autónomas tengan tribunales de cuentas y defensores del pueblo. En cuanto al estado de las cuentas de Extremadura, ha criticado que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, le haya dado una semana para diseñar un plan de ajuste económico financiero o si no "se intervendrá a la comunidad". Ha dicho que el lunes se reunirá con él y en ese encuentro tendrá oportunidad de hablar de la situación económica de Extremadura, que "ha superado el objetivo de déficit para todo el año ampliamente y que no tiene presupuesto para pagar la factura de la farmacia a partir de septiembre". Ha opinado que es "poco razonable" que el Gobierno de España permitiera a la Junta de Extremadura el año pasado aprobar un presupuesto con un crecimiento superior al 6 % "cuando no había cumplido el objetivo de déficit, el de deuda y el de pago a proveedores". "Y ahora cuando llega el Gobierno nuevo nos envía una carta y nos dice que todo eso lo tenemos que corregir, ¿no podrían haberlo hecho antes?", se ha preguntado.

También se ha referido a la atención sanitaria a inmigrantes y ha opinado que no cabe el debate porque "al ser humano se le atiende" ya que "ante la enfermedad no hay papeles". Finalmente, ha aplaudido el pacto PNV-PSE de Euskadi tras las elecciones municipales y ha dicho que habrá que esperar a las elecciones generales para ver qué acuerdos son posibles. "Dependerá de cuánto saquen las listas más votadas, los ciudadanos lo van a decir", ha opinado. Asimismo, ha opinado que "el PSOE no podrá gobernar España" si no tiene representación en las instituciones de Cataluña y de Euskadi a través del PSC y del PSE porque "lo que puede ocurrir es que acabe gobernando media España contra la otra media".