Baralla desprotegerá un espacio natural para abrir una cantera
Adega reclama a la Xunta que impida al Ayuntamiento modificar su plan urbanístico en un área con cuevas calizas
Un nuevo cráter amenaza con herir una vez más el paisaje calizo del municipio de Baralla si la Consellería de Medio Ambiente no frena el propósito del Ayuntamiento de desproteger una zona para facilitar las cosas a una firma minera. La Asociación para a Defensa Ecolóxica de Galicia (Adega) ha presentado en la Xunta alegaciones y un informe encargado a un biólogo con los que alerta de los valores que se perderán si se permite al consistorio modificar su plan urbanístico “por el interés particular de una empresa”. El grupo ecologista asegura que fueron los propios vecinos de Vale quienes le pidieron ayuda.
En la parroquia de Vale, en un espacio natural bañado por el Rego das Fontes, afluente del río Neira, hay cavidades calcáreas todavía inexploradas. Son de difícil acceso y, según Adega, en una visita superficial a la zona pudieron ver una “estalactita de siete metros” que pende sobre una honda cavidad desde hace decenas de miles de años. Esta área de afloramientos calcáreos es una excepción en el suelo de Galicia (solo el 0,52% de la superficie tiene la misma composición), y está asociada a determinadas especies botánicas que también son escasas (Acinos aplinus, Anthyllis vulneraria, Erinus alpinus, Ceterach offi, Geranium sanguineum o Sanguisorba minor). Según Adega, la empresa Canteira do Penedo, SA (Canpesa), que trabaja en la actualidad en otras canteras de caliza en la comarca, es responsable de daños anteriores en Baralla, como el que causó la explotación de Sixirei, que “destrozó por completo un castro”. “Recientemente”, sigue denunciando la asociación ecologista, “el Ayuntamiento aprobó otra modificación del planeamiento para ampliar esa cantera”.
En la zona afectada por la mina que ahora pretende abrir (a menos de un kilómetro de la de Sixirei) la empresa con el beneplácito del gobierno local, según el informe técnico presentado en la Xunta por Adega se encuentran “varios hábitats de interés comunitario”. El grupo reclama un estudio en profundidad para comprobar si en las cavidades naturales de la montaña “se refugian animales protegidos como varias especies de murciélagos”. Apuntan además que, antes de que pueda prosperar en la Xunta el expediente promovido por el Ayuntamiento para modificar su plan urbanístico, debería investigarse si dentro de las grutas existen “restos arqueológicos o paleontológicos como ya se descubrieron en época reciente en otras cuevas de la misma área geográfica”, en concreto en Eirós (Triacastela) o Valdavara (Becerreá).
Los vecinos de Vale, continúa denunciando Adega, también temen que el camino que atraviesa su núcleo se convierta en trepidante paso de camiones de la cantera. A la vera de esta senda engordan y siguen dando fruto “algunas formaciones de castaños centenarios”.
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