Homenaje en Aquitania a los batallones Gernika y Libertad
El lehendakari Urkullu presidirá el acto el próximo mes de abril
Un homenaje en Pointe de Grave, en Aquitania, recordará el próximo mes de abril a los integrantes a los gudaris (luchadores) de los batallones Gernika y Libertad, con motivo del 70º aniversario de la finalización de la II Guerra Mundial. Está previsto que el lehendakari, Iñigo Urkullu, y el presidente de Aquitania, Alain Rousset, presidan este acto, según ha informado la Fundación Sabino Arana.
La Fundación ha organizado un viaje los días 18 y 19 de abril para homenajear a los integrantes de los batallones 'Gernika' y 'Libertad' que participaron en los combates de Pointe de Grave, enclave cercano a Burdeos, y "culminaron con la liberación total de Francia y la rendición de las tropas alemanas".
Según ha recordado, los combates de Pointe-de-Grave se iniciaron el sábado 14 de abril de 1945 y duraron hasta el día 20. Durante los enfrentamientos cinco 'gudaris' murieron y 23 fueron heridos.
"El coraje de los hombres del batallón Gernika fue unánimemente reconocido por sus compañeros de armas: fue particularmente evidente durante los combates mortíferos de la primera jornada, en la cota 40, al sur de Montalivet y durante la conquista el 19 de abril del importante ''Blokhaus Y-33'', al norte de Soulac", ha destacado.
La Fundación Sabino Arana organiza un viaje a la zona donde fueron los combates
La salida será el sábado 18 de abril a las ocho de la mañana con destino a la cota 40, al sur de Montalivet, donde "vascos y anarquistas de los batallones Gernika y Libertad lucharon contra la tiranía nazi y participaron en la victoria final sobre el Reich hitleriano, en el triunfo de la democracia y de la libertad sobre la barbarie".
Está previsto que el lehendakari del Gobierno vasco, Iñigo Urkullu, y el presidente de Aquitania, Alain Rousset, presidan el acto de homenaje que en este punto se realizará a los caídos y a los supervivientes de ambos batallones.
A continuación, se trasladará a Soulac sur Mer, donde cada año, "los cada vez más escasos supervivientes siguen acudiendo a depositar un ramo de flores en el monumento conmemorativo allí erigido en recuerdo de los que combatieron y murieron en la batalla de Pointe de Grave".
Al día siguiente, se viajará a Rétaud, donde se celebrará una misa en la iglesia de San Troyan y una ofrenda floral en la Necrópolis Nacional, donde están enterrados los integrantes del batallón Gernika muertos en la batalla.