La Junta censura a la Iglesia por ocultar el origen de la Mezquita
El Cabildo ha borrado la denominación en la web, folletos y entradas al edificio. Rodriguez califica de “fundamentalista” la actitud y alerta de los daños en el turismo
La Junta de Andalucía teme que los manejos de la Iglesia católica con la Mezquita de Córdoba puedan afectar al turismo. “Es un recurso turístico imprescindible para Andalucía, el segundo en importancia después de la Alhambra de Granada y, con independencia de su uso religioso, que respetamos, resulta absurdo que no se exploten todas sus posibilidades turísticas por motivos religiosos”, dijo ayer el consejero de Turismo, Rafael Rodríguez, quien se reunió el miércoles con los miembros de la Plataforma Mezquita-Catedral, Patrimonio de Todos.
Los temores del titular de Turismo se deben a la desaparición de la palabra mezquita de la web institucional, de folletos y entradas al monumento. Pueden hacerlo porque la mezquita está puesta a nombre de la Iglesia, algo que ocurrió en 2006 sin que muchos se enteraran. El obispado la registró como propia porque una ley franquista les permite hacerlo sin dar cuentas a nadie ni demostrar que el edificio es de su propiedad.
“La actitud fundamentalista de la curia, que antepone su credo religioso al sentido común y a la naturaleza histórica del monumento, no me parece razonable ni aceptable” dijo ayer Rafael Rodríguez, tras los sucesivos intentos del Cabildo de Córdoba de borrar la palabra mezquita de todo lo relacionado con el monumento omeya, conocido internacionalmente por su mestizaje arquitectónico y declarado Patrimonio Mundial por la Unesco en 1984. Aunque fue el Ayuntamiento de la ciudad el que optó por llamarla Mezquita-Catedral en 1994 (con Herminio Trigo de IU al frente), las referencias musulmanas del conjunto han ido desapareciendo aquí y allá.
Guías con licencia para hablar
Hasta ahora, el Cabildo de Córdoba ha controlado la información que ofrecen los guías turísticos que trabajan en la Mezquita-Catedral y a los que les ha impuesto una versión en la que el pasado omeya del monumento es una pura anécdota. La Consejería de Turismo, que está trabajando en el desarrollo de la ley de Turismo de 2012, pretende garantizar la libertad de estos profesionales.
“Nosotros garantizaremos que cualquier guía habilitado por la Junta podrá interpretar el monumento sin interferencias a partir de la aprobación, antes del 30 de enero por el Consejo de Gobierno, del decreto de guías turísticos”, apunta el consejero de Turismo, Rafael Rodríguez. “Nadie hará exámenes de habilitación añadidos ni tendrá el monopolio de la interpretación de la Mezquita”, advierte.
Hace unos días el nombre de mezquita desapareció en el buscador Google Maps. Se desconoce la razón del cambio de nombre, pero originó desasosiego entre los miembros de la plataforma que quiere recuperarla para el patrimonio público. El titular de turismo andaluz trasladará su inquietud a la Iglesia: “La semana próxima nos dirigiremos por escrito al Cabildo para transmitirle nuestra preocupación por el hecho de que en sus folletos no se haga referencia a aquello por lo que el monumento es mundialmente conocido. El que hayan borrado la palabra mezquita es algo inconcebible. Ocultar su pasado como mezquita es como ponerle puertas al campo”, precisó Rodríguez, quien añadió que, si es necesario, mantendrán una reunión con los representantes de la Iglesia católica para tratar el tema. “Es como si a la Alhambra la llamaran palacio de Carlos V; absurdo. Cualquiera que contemple esta situación desde fuera se da cuenta de que alguien no razona con la suficiente claridad”, lamenta el consejero.
La plataforma planteó al consejero que la Junta elabore sus propios folletos turísticos, ya que la Iglesia solo anuncia “Catedral de Córdoba” y confunde a los visitantes que llegan a la ciudad atraídos por la fama de su Mezquita.
En la citada reunión, Rodríguez eludió el tema de la inmatriculación —la inscripción en el Registro de la Propiedad por primera vez— que el Obispado de Córdoba hizo de la Mezquita en 2006, por no ser un asunto de su departamento.
Pero el consejero, de IU, si opinó ayer sobre este asunto: “Personalmente me parece inaceptable, porque la Mezquita pertenece al pueblo de Córdoba y siempre ha sido así; aunque desde la Junta parece que tenemos serias dificultades jurídicas para intervenir en este asunto. Por otro lado, el grupo de IU en el Congreso está trabajando para reunir firmas de 50 diputados y presentar un recurso de inconstitucionalidad contra el artículo de la Ley Hipotecaria que permitió a la Iglesia hacer las inmatriculaciones”.
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