El campo fija por vez primera la igualdad de hombres y mujeres

Por primera vez, los empresarios se han comprometido a que haya igualdad de género en el campo andaluz. El convenio del campo de la provincia de Jaén, que sirve de referente para el resto del sector agropecuario y que afecta a más de 100.000 trabajadores temporeros, ha introducido una cláusula en la que se garantiza “el principio de igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres en el acceso al empleo, en la formación y promoción profesional, y en las condiciones de trabajo”.

Desde hace años, los sindicatos venían denunciando que en el campo no existía igualdad real entre hombres y mujeres. Y ponían como ejemplo los casos en los que las campañas agrícolas se reducen sensiblemente. Entonces, el poco trabajo que hay casi siempre recae en el hombre, que ocupa tres de cada cuatro empleos en la agricultura. Sin embargo, la paradoja es que la mujer representa en torno al 60% de los afiliados al Régimen Agrario de la Seguridad Social.

Los sindicatos llevan años denunciando la marginación

Ahora, en el inicio de una campaña de recolección de la aceituna —que va a suponer la pérdida de 6,4 millones de jornales en toda la comunidad— sindicatos y patronal suscribieron este lunes un nuevo convenio colectivo para los trabajadores del campo donde se plasma el compromiso de no discriminación hacia la mujer. “Es un avance significativo, por cuanto las mujeres son las grandes perjudicadas a la hora de lograr las peonadas que dan derecho al cobro del subsidio agrario”, expone Antonio Marcos, de la Federación Agroalimentaria de UGT en Jaén. Precisamente, este martes, alcaldes y portavoces socialistas registran ante el Ministerio de Empleo y Seguridad Social las miles de firmas recogidas para la exoneración de las peonadas para el cobro del subsidio, una petición que avalan el conjunto de fuerzas políticas en Andalucía a excepción del PP.

Con todo, la patronal ha rehuido plasmar ese compromiso en cifras al rechazar la cláusula de paridad laboral que pusieron encima de la mesa los sindicatos, es decir, que ningún sexo tuviera una presencia superior al 60% en las contrataciones. “Hoy el campo se ha mecanizado mucho y la mano de obra se ha especializado, y son los hombres los que más se han profesionalizado”, subrayó Luis Carlos Valero, gerente de Asaja en Jaén, que valora, no obstante, el compromiso de no excluir a la mujer de las labores del campo.

Los sindicatos se felicitan, en todo caso, por haber logrado poner fin a una situación marcada por las “actitudes discriminatorias hacia la mujer; actitudes arcaicas, desfavorecedoras e impropias del siglo en el que estamos”, como la definió UGT en una resolución aprobada en su comité provincial. Para la equiparación salarial entre hombres y mujeres en la aceituna hubo que esperar hasta principios de este siglo.

El acuerdo afectará a más de 100.000 trabajadores del sector agropecuario

Posteriormente, en 2005, se logró que las mujeres embarazadas puedan solicitar el cambio de actividad si se considera que la que realiza en ese momento puede poner en riesgo la gestación.

El convenio del campo suscrito este lunes prevé una subida salarial del 0,60% pare esta campaña, aunque se aplicará con efectos retroactivos desde el 1 de octubre. Para el segundo y el tercer año el aumento será equivalente al IPC de la provincia, aunque nunca se podrá superar un techo del 1% ni bajar de un suelo del 0,4%. Finalmente, para la campaña 2017-2018 se establece una subida salarial que será, como mínimo, del 0,%, y como máximo del 1,4%.

Asaja, que es la organización mayoritaria en la patronal agraria, destacó que este convenio “garantiza la paz social en el campo y la no pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores, condición fundamental para refrendar dicha paz social en un año difícil debido a la escasez de cosecha”.