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Xilxes cambiará parte de su red de agua tras un vertido de gasóleo

Un vecino tiró por error 200 litros de combustible para la caldera El Ayuntamiento trabaja para determinar la zona afectada por el vertido

El Ayuntamiento de Xilxes deberá cambiar parte de la red de abastecimiento de agua potable después de que un vecino arrojara por error 200 litros de gasóleo que afectaron al servicio de centenares de viviendas ubicadas en la costa. El accidente se produjo el pasado 24 de julio y desde entonces el consistorio trabaja en determinar toda el área que ha resultado afectada para concretar el alcance y coste de unos trabajos que el alcalde, Vicente Martínez, ha estimado en más de 200.000 euros.

“El vertido se conoció al momento porque el olor del gasóleo es muy característico y llegó a salir por los grifos de las viviendas colindantes”, ha explicado el regidor. El alcalde ha señalado que desde ese día se decretó la restricción de agua en la zona al ser declarada por la Consejería de Sanidad como “no apta” para el consumo humano. En la actualidad las viviendas afectadas se han reducido a unas 400.

Martínez habló de las dificultades para hacer frente a este suceso, puesto que no hay muchos antecedentes ni protocolos de actuación. Finalmente, apunta, se ha optado por el cambio de la red. El problema ahora está en decidir qué se va a hacer con las instalaciones de dentro de las viviendas.

El origen del vertido se focalizó en una vivienda cuyo propietario vertió por error el gasóleo en un depósito de agua en lugar del depósito destinado a la caldera.

La Diputación de Castellón aprobó en el último pleno una partida de 50.000 euros para la sustitución de la red de agua. El alcalde de Xilxes ha explicado que esto era el gasto mínimo estimado en su día para sustituir las tuberías pero que el importe, seguramente, ascenderá.

También en L’Alcora continúan las restricciones de consumo de agua tras detectarse, la semana pasada, un alto nivel de sulfatos en el pozo que abastece a la mayor parte de la población. Desde el Ayuntamiento de L’Alcora explicaron que la medida es “preventiva” y que se continúa trabajando en los análisis del agua hasta que se verifique que vuelve a ser potable

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