Una banda de Arousa fletó los 800 kilos de cocaína incautados en un yate

Una potente organización de narcotraficantes de la ría de Arousa ha visto frustrado el desembarco de un alijo de 800 kilos de cocaína que transportaba un yate apresado en alta mar en la noche del pasado lunes, frente a las costas de Portugal. El abordaje por la patrullera Río Miño de la Guardia Civil se realizó poco antes de que una planeadora alcanzase el velero para recoger el cargamento que la organización gallega tenía previsto desembarcar en algún punto de la ría de Arousa, en la costa de O Grove o Ribeira, según explicaron fuentes de la investigación.

 La cocaína fue alijada por el yate Pandora Lys, de 16 metros de eslora, con base en el puerto de Valencia, a principios de agosto en un punto del mar Caribe que suministraron los proveedores de un cartel colombiano El cargamento, valorado en más de 24 millones de euros, iba a ser distribuido en España y otros países del sur de Europa. A bordo del velero remolcado ayer al puerto de Vigo se encontraban tres tripulantes, E. Pose, vecino de la Costa da Morte; Cristina A.L., de Valencia, y Avelino Martínez Gracía, de 40 años, un conocido lanchero de la comarca de Arousa. Este último iba a bordo del velero para supervisar el desembarco de la droga para la organización y estaba previsto que regresara de tripulante en una de las planeadoras que acercarían la cocaína a la costa.

El abordaje se realizó en aguas internacionales en una operación conjunta entre el Greco (Grupo de Respuesta contra el Crimen Organizado) de la policía y la Unidad contra el Crimen Organizado (UCO) de la Guardia Civil, con la cooperación de la agencia antidroga DEA de Estados Unidos, que dio detalles para la localización del barco. La coordinación la realizó el Centro de Inteligencia contra el Crimen Organizado (CICO), y en el apresamiento del yate colaborararon aeronaves de los ejércitos español y portugués.

La operación fue coordinada desde Madrid y dirigida por un juzgado de la Audiencia Nacional. Según ha explicado el Ministerio del Interior, la policía llevaba desde noviembre pasado realizando el seguimiento del yate y tras la pista de la organización de narcotraficantes dedicada al transporte de grandes cantidades de cocaína desde Suramérica a España efectuar el transporte, los integrantes de este grupo empleaban diversos tipos de embarcaciones, como mercantes, pesqueros, veleros o lanchas rápidas. La organización está considerada como una de las más activas desde que en 2008 fueran prácticamente aniquilados los medios marítimos de las principales bandas tras sucesivos golpes policiales.

Este es el primer alijo importante con destino a Galicia incautado este año. El pasado verano, fue apresado el buque senegalés Riptide con más de 3.000 kilos de cocaína, valorada en 115 millones de euros, y el año anterior se abordó el pesquero Ratonero, con base en O Grove, que transportaba 1,7 toneladas de la misma sustancia.

Después de un parón de casi cinco años, que obligó a las grandes compañías de la cocaína a replegar las planeadoras de la ría de Arousa con las que habían movido enormes alijos en la pasada década, los expertos antidroga no descartan un cambio de tendencia de las bandas para volver a antiguos métodos como los pesqueros y las embarcaciones deportivas ya empleados en otras épocas. Los pequeños alijos de cocaína han continuado llegando a Galicia y a otros puntos calientes de la Península, como la Comunidad Valenciana, Cataluña y Algeciras, principalmente a través de contenedores, aunque hay constancia de algunos recientes desembarcos en la ría de Arousa, concretamente en O Grove, a través de pesqueros y planeadoras manejados por históricos lancheros de las Rías Baixas que llevaban varios años en paro.