_
_
_
_

La Xunta carga contra Francia por la alerta sanitaria sobre el mejillón

La conselleira de Mar asegura que no hay pruebas de que entrase molusco gallego en mal estado

Batea de mejillón en la ría de Arousa
Batea de mejillón en la ría de Arousaxurxo lobato

La Xunta expresó ayer su malestar con las autoridades francesas por haber lanzado una alerta sanitaria sobre el mejillón gallego sin confirmar todavía si el origen de una intoxicación que afecta a unas 60 personas en ese país se debe a la ingestión del molusco y si este procedía de las rías gallegas. Tres días después de difundir el aviso través de la red informática de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos de la Unión Europea, que informa de los riesgos alimentarios, Francia sigue sin aclarar el origen de las intoxicaciones pese a que España envió un rápido y exhaustivo informe sobre la procedencia del mejillón. La noticia golpeó con dureza a un sector productivo en estado de ansiedad por la persistencia de marea roja, que ayer mantenía cerrados el 88% de los polígonos de bateas de las rías y el 40% de los bancos de otros moluscos como berberecho, almeja y navaja.

En las dos últimas semanas se ha extraído muy poco mejillón por el cierre de las bateas por seguridad

 El informe enviado a Francia y elaborado por el Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño de Galicia (Intecmar) apunta a que la partida de molusco bajo sospecha, la exportada a ese país en los últimos días, procedía de cuatro polígonos de Galicia abiertos al consumo, ya que no estaban afectados por la biotoxina causante de la marea roja. El producto, según la Xunta, estaba perfectamente etiquetado, conforme a los protocolos de seguridad alimentaria, e incluía su calificación por calidad microbiológica. Una parte del envío era apto para el consumo inmediato mientras otro de los lotes requería de depuración previa, indicaron fuentes oficiales.

El Gobierno gallego reclamó cautela ante un episodio que no es nuevo. En los cinco últimos años, Francia e Italia —los principales destinatarios de las exportaciones del mejillón cultivado en Galicia— lanzaron varias alertas por casos similares que no fueron aclarados y solo se anularon varias semanas después a través de los mismos servicios informáticos europeos sobre seguridad alimentaria. En medio de la confusión generada por este nuevo aviso francés, Bélgica notificó el pasado jueves por los mismos mecanismos de información europeos que había retirado del mercado una partida de mejillón de producción propia, comercializado también en Holanda y Francia.

Más información
La marea roja alcanza al marisco en arena en la ría de Vigo
La marea roja obliga a cerrar el 70% de los polígonos de mejillón
Los mejilloneros temen otro año negro por las continuas mareas rojas

La conselleira de Mar, Rosa Quintana, insistió ayer en que Francia todavía no ha realizado los análisis pertinentes y que no está demostrado que el molusco procediese de Galicia. “La alerta aún no está confirmada”, aseguró Quintana quien, al igual que representantes del sector mejillonero, recordó los antecedentes de alertas infundadas. “Sabemos por otras ocasiones que lo primero que hacen cuando tienen una intoxicación es vincularla al mejillón gallego”, declaró Quintana. “Cualquier otra intoxicación alimentaria puede ser la causante”. La conselleira insistió en lo estricto de los controles de las aguas que se realizan a diario en las rías y en que el mejillón que se comercializa por los “cauces legales” está perfectamente garantizado. El presidente del Consello Regular do Mexillón de Galicia, Francisco Alcalde, dudó, por su parte, de la eficacia de los sistemas de depuración que se usan en Francia.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

De las tres modalidades de biotoxina (paralizante, amnésica y diarreica), los 60 afectados en Francia, según la información transmitida por las autoridades de ese país, presentaban síntomas coincidentes con los de la última. El pasado julio, también se registró en Galicia un episodio de intoxicación por toxina amnésica, pero los afectados, una pareja, había adquirido los mejillones en la Ría de Arousa por fuera de los cauces legales de comercialización.

La alerta francesa, en todo caso, sembró gran inquietud entre los productores, que ya temían por las consecuencias económicas de la persistente marea roja. Ese fenómeno se produce todos los años, pero en 2013 alcanzó una virulencia desconocida y se prolongó tanto en el tiempo que hizo caer un 20% la facturación del sector. Este año la situación era bastante mejor hasta que los niveles de la biotoxina comenzaron a dispararse en abril y la situación empeoró este mes. Las fábricas de conserva de pescado también están resultando muy afectadas por la falta de producto para envasar.

La alerta francesa llegó en un momento en que la biotoxina parece estar remitiendo. El pasado jueves se pudo levantar la veda en un polígono de bateas próximo a Vilagarcía, en la ría de Arousa, y ayer en otro de Redondela, en la ría de Vigo. Los productores venían advirtiendo de que, si persistía la situación, los mejillones gallegos podrían desaparecer del mercado en unos diez días. Los mariscadores, también afectados por la marea roja aunque en menor medida, son optimistas. En Pontevedra, confían en poder salir de nuevo el próximo lunes si se confirma que la biotoxina ha remitido, informa Europa Press.

Un 10% de las exportaciones

De un promedio anual de 200 millones de kilos de mejillón que se producen en las bateas gallegas, Francia importa alrededor de un 10% de este molusco. Es el segundo mayor comprador europeo después de Italia, que le supera en aproximadamente dos puntos porcentuales, según datos de la asociación de depuradoras Agade. Su presidente, Ramón Blanco, insiste en que la trazabilidad —la procedencia y la trayectoria que ha seguido el producto hasta llegar al consumidor final— de las exportaciones va perfectamente indicada en las remesas que se envían, en las que constan también la calidad microbiológica de las aguas de procedencia y si son aptas para el consumo inmediato o requieren de una depuración previa.

Ante la preocupación que ha generado en el sector mejillonero la alarma sanitaria decretada por las autoridades francesas, la Xunta ha convocado para el próximo martes una reunión de la Comisión do Mexillón con el fin de analizar este nuevo episodio. En ese organismo están representadas las principales agrupaciones productoras de Galicia y la Consellería de Medio Rural e do Mar. A continuación, también se convocará a representantes de las industrias derivadas.

Además de la confusa alerta francesa, el sector aprovechará para transmitir su inquietud porque la producción vuelva a sufrir una fuerte caída, como el pasado año, por las mareas rojas. Pese a la mejoría de la situación, ahora solo están abiertos seis de los 51 polígonos de bateas. La Consellería do Mar ya anunció ayudas económicas para un sector que prácticamente no mueve el producto desde que la marea roja hizo su aparición en abril, aunque los bateiros todavía tienen pendientes de cobrar las concedidas por el grave parón de 2013.

Sin saber si finalmente habrá o no resultados de las analíticas por parte de las autoridades galas, los productores no conceden ninguna credibilidad a la medida adoptada por Francia porque en tres ocasiones anteriores creó una alarma injustificada sin estar avalada por informes toxicológicos. En la reunión de la comisión, los representantes del sector plantearan que se exijan a la Unión Europea otros protocolos de prevención y alerta. Bruselas ordenó en 2010 imponer gradualmente un nuevo método de análisis que no convence ni a los productores ni a la Xunta y que algunos consideran que fuerza parones injustificados de la producción.

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_