Récord de deducciones fiscales en la comunidad más endeudada

La Comunidad Valenciana es la que más desgravaciones fiscales permite de España. Y ello pese a ser también la autonomía más endeudada, con el 32,8% del PIB, y la que, con mucha diferencia, más dinero ha tomado prestado del Gobierno para pagar a proveedores, 4.354 millones de euros. Una cuarta parte de lo solicitado por los Ejecutivos regionales.

El consejero de Hacienda, Juan Carlos Moragues, destacó este lunes la batería de desgravaciones sobre el IRPF de la Generalitat: “Somos la región que más deducciones autonómicas aplica, un total de 23. La que tiene mayor numero de beneficiarios en términos porcentuales. Y la que más deducciones aplica al total del importe declarado”, afirmó.

Moragues, que es inspector de Hacienda y fue nombrado después de la dimisión de su predecesor para intentar poner orden en unas cuentas públicas muy castigadas por la crisis, calculó que 240.000 valencianos se beneficiarán de las deducciones. Los últimos datos disponibles para toda España reflejan que la Comunidad Valenciana fue la segunda tanto en número de beneficiarios como en importe de las desgravaciones. Ascendieron a 72,8 millones, solo por detrás de Madrid (113,5 millones), según información de la Agencia Tributaria sobre la liquidación del impuesto sobre la renta del ejercicio 2011.

A distancia se situaron Cataluña (41,8 millones) y Andalucía (28,9 millones). Y aún más lejos, Galicia (18,6 millones) y Aragón (medio millón de euros).

Solo Madrid supera a Valencia, con la que ha compartido desde hace tiempo la bandera del liberalismo en materia fiscal. Pero Madrid, además de mayor población, tiene unas finanzas mucho más saneadas que las valencianas. La Generalitat dobló el límite de déficit fijado por el Gobierno para el año pasado. Y el Ejecutivo de Alberto Fabra reclama regularmente —aunque no con la contundencia que oposición y agentes sociales le reclaman— un cambio en el modelo de financiación al considerar que la asignación actual no alcanza para cubrir los servicios básicos.

Vivienda y natalidad son los dos grandes pilares de las deducciones de la Generalitat

José Antonio Pérez, uno de los autores del informe sobre financiación autonómica solicitado por las Cortes Valencianas, señala que otras autonomías, como Extremadura y Castilla y León, “las han reducido para recaudar más” ante la caída de ingresos como consecuencia de la crisis. El Gobierno del popular José Antonio Monago, por ejemplo, ha reducido las deducciones en Extremadura a la mitad. Ismael Fernández, autor también del informe sobre financiación, recordó que en su dictamen, los expertos hicieron hincapié en la necesidad de la “corresponsabilidad fiscal”. Esto es, de que las autonomías cuenten con margen para implantar la política impositiva que se ajuste a sus necesidades. Y en estos momentos, añadió Fernández, las necesidades pasan por obtener recursos.

Moragues defendió el esquema tributario del Consell: “Hay que conseguir el equilibrio entre estabilidad presupuestaria, que es condición necesaria pero no suficiente para salir de la crisis. Y complementarla con políticas activas fiscales que incentiven” la economía. Moragues explicó que las deducciones se dirigen sobre todo a las rentas medias y bajas.

La Generalitat ofrece el doble de deducciones que Madrid y Cataluña. Solo en relación con la vivienda, el Gobierno de Fabra contempla las mismas deducciones (seis) que las que existen en total en Baleares y Cantabria, y más que en La Rioja (cuatro).

Las deducciones a la vivienda persiguen no solo facilitar su acceso sino contribuir a estimular el sector inmobiliario, declaró Moragues. Algunas desgravaciones de este capítulo representan cantidades pequeñas. Como los 78.800 euros deducidos por “arrendamiento de vivienda por actividades en distinto municipio”. Pero las hay muy significativas. Como los 11,5 millones perdonados por “adquisición o rehabilitación de vivienda habitual con financiación ajena”. O los 10,2 millones dejados de ingresar por “arrendamiento de la vivienda habitual”, siempre en 2011.

La desgravación más importante de todas pertenece a otro de los grandes pilares de las deducciones de la Generalitat, que es el relacionado con la natalidad. Se trata de la desgravación más genérica de ese apartado, “nacimiento o adopción de hijos”, que ascendió a 18,1 millones.