Condenan a tres coraleros furtivos a pagar una multa de 1.806 euros

El Juzgado de lo Penal número 2 de Girona ha condenado a pagar una multa de 1.806 euros a tres coraleros furtivos reincidentes, a los que también ha inhabilitado para la pesca de coral durante tres años y medio. La sentencia considera probado que extrajeron 13 kilos de coral rojo (corallium rubrum) de la Foradada, una zona a caballo entre los Alt y Baix Empordà, donde la ley restringe la extracción de este preciado animal. Los acusados no contaban con una licencia en vigor y el tamaño de los ejemplares era un 80% menor a la medida permitida.

La fiscal había pedido para Pere Sureda Llobet, Rafael González Jiménez y Alberto Adam Boxadós una multa de 4.320 euros y su inhabilitación durante cinco años. Los procesados aseguraron que el día de los hechos, el 1 de septiembre de 2009, habían salido a buscar gusanos de mar para utilizarlos de carnada y que los dos sacos de coral hallados en la barca eran de hacía dos años, cuando sí disponían de licencia de pesca. Afirmaron que se trataba de deshechos de otra extracción. Sin embargo, el coral perece al poco de salir del agua y nueve de los 13 kilos incautados estaban vivos.

La sentencia recuerda que la normativa autonómica establece tres requisitos indispensables para poder extraer coral: que se tenga la licencia correspondiente, que no se actúe en zonas ni en época de veda y que la base del animal no mida menos de siete milímetros. En este caso, gracias a los análisis y declaraciones de los nueve agentes rurales que actuaron, considera “evidente” que los acusados “infringieron los tres requisitos que eran necesarios para hacer la extracción”. La juez concluye que, al ser profesionales, conocían estas condiciones y que “eran sabedores de que su actividad ponía en grave peligro la zona”. Además decreta el comiso de la pesca, de la embarcación neumática, las piquetas, los coladores, las sacas y los equipos de inmersión intervenidos a los acusados.