_
_
_
_

El sector turístico aplaude el decreto para acabar con el mercado ilegal

Las viviendas para turistas que se alquilen un mes tendrán que estar registradas

Un complejo turístico en Torremolinos (Málaga).
Un complejo turístico en Torremolinos (Málaga).garcía-santos

La Consejería de Turismo y Comercio y los agentes sociales y económicos han dado luz verde en la Mesa del Turismo al borrador del nuevo decreto que regulará las viviendas de uso turístico en Andalucía. El documento, muy demandado por el sector, tiene como objetivo combatir la competencia desleal y el intrusismo e intentar que aflore la economía sumergida. La norma también persigue “unas mínimas garantías” para los usuarios, velar por el cumplimiento de unos requisitos básicos de infraestructura y calidad y luchar contra la precariedad laboral. Andalucía tendrá por primera vez una norma de estas características (solo Cataluña dispone de ella) y previsiblemente entrará en vigor en seis meses. Ahora empieza su tramitación administrativa, que incluye un periodo de alegaciones.

 El decreto servirá, además, para establecer un censo de viviendas turísticas en la comunidad, que ahora no existe. No hay datos oficiales sobre este tipo de alojamientos, pero el sector estima que aproximadamente el 20% de la oferta se mueve en el mercado negro. Estas instalaciones carecen de cobertura legal desde la modificación por parte del Gobierno de la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), a mediados de 2013. El borrador afecta tanto a las casas que se ceden en su totalidad como a las que ofrecen habitaciones (Bed and Breakfast). Están excluidos los establecimientos de apartamentos turísticos.

Definición. El borrador considera viviendas de uso turístico las que están ubicadas en inmuebles levantados en suelo con uso residencial (sin incluir las rurales) que ofrezcan alojamiento “de forma habitual” y con fines turísticos. Se entenderá que ocurre así cuando se publiciten para su alquiler por Internet o cualquier otro medio y cuando se comercialicen y promocionen a través de agencias de viajes u otras empresas. También existirá un uso turístico si el arrendamiento no excede un mes al año por cliente. A partir de este tiempo, los alquileres están regulados por la LAU. La norma andaluza está pensada para alquileres de unos días o semanas.

Un 3,9% más de visitantes extranjeros

Andalucía recibió entre enero y marzo de 2014 un total de 1.168.583 turistas extranjeros, lo que representa un aumento del 3,9% respecto al primer trimestre del año pasado, según la Encuesta de Movimientos Turísticos en Frontera (Frontur) difundida ayer por el Ministerio de Industria, Energía y Turismo. Esta cifra sitúa a Andalucía como la tercera comunidad en número de visitantes internacionales, detrás de Canarias, que elevó un 10,6% el número de estos visitantes, y Cataluña, que sumó un 9,8% más que en 2013. La región andaluza acaparó en este periodo un 11,6% del total de visitantes extranjeros del país, que fue de 10,1 millones.

El primer trimestre es positivo, aunque en marzo, según este estudio, Andalucía recibió 464.633 turistas internacionales, con una caída en este caso del 10,5% en relación al mismo mes del año pasado. Sin embargo, hay que tener en cuenta las alentadoras cifras cosechadas en Semana Santa, que invitan a pensar en una buena temporada alta y en que el sector disfrutará de un 2014 mejor que el pasado ejercicio, cuando ya se vislumbró la recuperación de la industria turística. La ocupación hotelera y las pernoctaciones durante estas últimas vacaciones han recuperado los niveles de 2007, antes de la crisis.

Según los datos provisionales avanzados por la Consejería de Turismo, basados en una encuesta realizada entre el 19 y el 20 de abril entre 330 hoteles de la comunidad andaluza, la ocupación entre el Domingo de Ramos y el Sábado Santo se situó en el 65,2%, un 5% más que en el mismo periodo de 2013, con 1,08 millones de pernoctaciones (un 2,7% más). El consejero Rafael Rodríguez completará hoy la información de los resultados turísticos durante la Semana Santa.

Registro. Una vivienda que se destine a alojamiento turístico deberá estar inscrita obligatoriamente en el Registro de Turismo de Andalucía. Su propietario tendrá que hacer una declaración responsable ante la consejería, trámite que es gratuito, y aportar sus datos identificativos. Ese número de anotación que obtenga tendrá que aparecer en toda publicidad o promoción que realice a través de cualquier medio.

Régimen sancionador. Se considerará que una vivienda es “clandestina” si se inicia la actividad turística sin que haya constancia de su registro. Aquí puede entrar en escena el servicio de inspección de la consejería, que será el encargado de velar por que se cumpla la norma. Quienes infrinjan el futuro decreto, incurrirán en responsabilidad administrativa. Sobre la cuantía de las posibles sanciones, el borrador remite a la Ley del Turismo de Andalucía (Ley 13/2011), que diferencia entre infracciones leves, graves y muy graves con multas que oscilan, incluidas las tres categorías, entre los 2.000 y los 150.000 euros. El titular de la vivienda no podrá alegar que se trata de su domicilio en caso de que sea objeto de una inspección, según el borrador.

Servicios mínimos. Las viviendas turísticas deberán estar convenientemente amuebladas y dotadas de electrodomésticos y enseres para su uso inmediato. Sus habitaciones tendrán ventilación directa al exterior o a patios no cubiertos. Los apartamentos tendrán sistema de refrigeración y de calefacción, en caso de que se alquilen entre octubre y abril (para alcanzar y mantener una temperatura ambiente de 19 grados centígrados, puntualiza el documento). El usuario tendrá a su disposición una hoja de quejas y reclamaciones. Un botiquín de primeros auxilios y un extintor son otros artículos obligatorios incluidos en la futura norma, además de información turística sobre la zona y servicio de limpieza a la entrada y salida de nuevos clientes, entre otros detalles. El precio será por noche de estancia y los explotadores del servicio podrán exigir un adelanto como señal de hasta un 30% del coste total.

“El objetivo no va a ser nunca perseguir, recaudar ni sancionar, sino que aflore esa bolsa de economía sumergida”, apunta el consejero de Turismo, Rafael Rodríguez. Ya que la entrada en vigor de este decreto irá paralela a una modificación de la norma que actualmente regula el Registro de Turismo de Andalucía. Entre los cambios en el registro destaca el que permitirá a los inspectores levantar actas de infracción simplemente con que visualicen un anuncio de una vivienda turística sin su correspondiente número de inscripción. Es decir, no serán necesaria realizar una visitas física. En esta tarea también se pretende involucrar a los portales de Internet desde los que se ofrecen los alojamientos.

La intención de la consejería es dar cuenta a los Ayuntamientos y a la Agencia Tributaria de los inmuebles registrados. “Se trata de incentivar a los propietarios para que inscriban sus viviendas y legalicen su actividad, no que esta deje de existir. Tiene su público y sus clientes y generan ingresos complementarios para muchas familias”, concluye Rafael Rodríguez.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_